Por: Elizabeth Salazar T.
Finalmente, esta semana se estrena la secuela del particular superhéroe “Deadpool 2”, al inicio de la película podemos ver una escena de pre-créditos que nos deja un poco desconcertados, pero a medida que vamos viendo el desarrollo de la trama, la podemos entender. Wade encarnado por el carismático Ryan Rynolds nos muestra una historia donde hay amor, acción, compañerismo y mucho humor.
Esta vez podemos ver como Deadpool quiere formar un equipo, que denomina como Fuerza X, con la intención de rescatar a un joven mutante. Sus integrantes son muy diversos, desde Domino (Zazie Beetz), es una mercenaria que se jacta de su buena suerte, Bedlam (Terry Crews) quien puede controlar el campo electromagnético y hasta Pete Wisdom (Rob Delaney), un humano que vio el anuncio y por supuesto, Cable (Josh Brolin) como un soldado cibernético mutante que viaja en el tiempo.
Deadpool nos muestra a lo largo de toda la historia que se supera a si mismo, tiene una gran dosis de humor irreverente, aunque no molesta porque esta vez es un recurso bien utilizado. Llena de referencias, guiños y personajes que reconocerán fácilmente quienes gustan de las películas de superhéroes.
Este no es un film apto para todos, ya que el personaje se caracteriza por su humor subido de tono, además tiene escenas de violencia que algunos puede incomodar, quienes vieron su primera parte, entenderán perfectamente a lo que me refiero. Si le agradó la anterior, sin duda se reirá de buena gana con el irreverente Deadpool.
Director: David Leitch (“Atómica” y “Otro día para matar”)
Duración: 118 Minutos
