El temor al desabastecimiento ha sido la tónica en estos días. Por eso el Colegio de Nutricionistas llama a la calma y  entrega consejos desde cómo preparar harina en casa, hasta el reemplazo de algunas preparaciones.

Acá van sus tips:

 -Se recomiendan los alimentos enlatados, deshidratados y de fácil preparación.

Según las características de la familia así será la cantidad de alimentos que deban almacenar teniendo en cuenta la fecha de vencimiento y la renovación cuando sea necesario.

-Se puede cocinar para dos días, reservando en recipiente con tapa. Una vez fríos, refrigerar rápidamente.

-Beber agua es la mejor manera de hidratación, en caso de tener problemas de acceso o con la matriz, recuerda hervir el agua. Cuidar su consumo especialmente en niños, gestantes y adultos mayores.

-Para la desinfección de aguas no cloradas se puede usar 10 gotas de cloro, de uso casero, por cada litro de agua. Dejar reposar 30 minutos.

-Prefiere y mantiene la lactancia materna que además de alimentar favorece el apego y la contención.

-Evita el consumo de colaciones no saludables y comida alta en grasas saturadas como cecinas y embutidos.

-Recuerda comer en familia,  se ha reconocido como una gran forma de protección para niños y adolescentes.

-El huevo es un alimento saludable y de bajo costo de gran versatilidad en la cocina. Fíjate que esté fresco y úsalo en reemplazo de la carne en caso que no puedas adquirirla.

Respecto a los distintos grupos alimenticios la entidad señala:

Verduras:

Puedes porcionar y congelar las verduras que tengas, comprar verduras congeladas o en conservas.

Aceites:

Prefiere aceites de buena calidad y no reutilices el de una fritura.

Granos:

Tienen larga vida, mantén siempre una reserva de estos alimentos en tu hogar. En caso de no tener disponibilidad de harina de trigo, puede ser harina cualquier grano que tengas en casa , como avena o linaza, sólo debes procesar estos alimentos.

Carnes, legumbres y huevos:

Las legumbres secas tiene una larga vida útil, prefiere preparaciones en base a legumbres , ya que tienen menor costo, son rendidoras y aportan mayor saciedad.

Lácteos:

Prefiere leche en polvo, porque no es perecible.

Frutas:

Puedes porcionar y congelar las frutas que tengas, comprar previamente congeladas, deshidratadas o comprar puré en frutas.