Experta explica que secuelas sicológicas ante la crisis social podrían durar meses
Así como es normal que niños y adultos se sientan afectados por la situación país que estamos viviendo, la sicóloga Valentina Bravo también señaló que, aunque los niños no estén yendo a clases esta semana, es importante que mantengan la rutina y que disminuyan el acceso a redes sociales y a la las noticias de la televisión.
Por Paola Leyton
Desde el estallido social que tuvo lugar el viernes pasado en nuestro país, todos los chilenos se han visto afectados emocionalmente, en especial los niños y adultos mayores. La exposición constante a hechos de violencia ya sea presencial o en los medios de comunicación y las Redes Sociales, ya ha calado hondo en gran parte de la población y a juicio de Valentina Bravo, sicóloga de la clínica Indisa, las secuelas sicológicas se van a ver con más fuerza en un par de meses o incluso años.
“Así como un terremoto genera ansiedad y angustia y se manifiesta durante mucho tiempo, estamos en una situación que implica el corte de la actividad de nuestras actividades cotidianas y es imposible no sentir confusión o sentirse raro”, explica la especialista.
Y es enfática en aclarar que “no hay ningún consejo para que a uno no le afecte la situación actual. Hay que aceptar que es normal sentir angustia, miedo, incertidumbre y que no debemos pedirnos como adultos que esto no nos afecte, pues por la envergadura de lo que estamos viviendo, lo anormal sería que a uno no le afectara”.
¿Qué le aconsejaría a las personas que se sienten más afectadas emocionalmente?
Todos hemos podido ver como a cada uno de nosotros, esta situación nos ha afectado de manera diferente. Algunos manifiestan angustia, irritabilidad, hipersensibilidad. Y en los niños más pequeños, que es difícil que puedan expresar lo que sienten, es muy probable que estén más mañosos o activos.
Tips para niños:
Es importante entender que para los niños más pequeños es muy difícil que logren poner en palabras sus sentimientos y emociones. Seguro los veremos más inquietos, mañosos y hasta llorones por estos días y es normal.
Por ello, hay que explicarles el contexto de lo sucedido, pero de una manera neutral, para adaptarnos a su realidad, sin formular juicios.
Puede que mientras ellos jueguen, los papás estén viendo noticias al lado, lo que no es aconsejable, pues aunque parezca que los niños están en su mundo jugando, escuchan todo y no es bueno que escuchen de manera permanente palabras como violencia, guerra, sangre, barricadas, etc.
A los 10 años, los niños ya tienen un mayor razonamiento y pueden entender bien lo que ocurre, pero igual que en los niños menores, no hay que transmitirles excesiva euforia ni valoraciones personales.
En términos de rutina, en la medida de lo posible, hay que tratar de continuar con las tareas del día a día, desde el lavado de los dientes hasta el vestirse y respetar los horarios para jugar, para estar en RRSS (y limitando el acceso a cierta información) y para las comidas y acostarse. Hay que tratar de mantener los hábitos para darle una continuidad al niño para que no sienta un quiebre en todo lo que él acostumbra a vivir. Explicándoles que es un proceso momentáneo.
Tips para adultos:
Lo importante es que cada uno encuentre un espacio que lo tranquilice. Si te hace mal ver tantas noticias, que las minimices, lo mismo con las redes sociales. Si te tranquiliza meditar, hacer pausas de respiración, pues son espacios que nos ayudan a trabajar la pérdida de control y nos hacen conectar con nosotros mismos.
Es importante también poner en palabras no solo lo que uno piensa política o valóricamente, sino también las emociones que surgen. Es bueno manifestar si estoy angustiado, enrabiado o irritable, pues así comienzo a racionalizar las emociones y a poder comprender el porqué de mis estados. Si puedes compartir esas emociones con alguien, tanto mejor.
Tips para adultos mayores:
Mientras que para la mayoría de los jóvenes las protestas y situación social tienen una visión de futuro, para los adultos mayores esta situación ocurre en su presente y muchos sienten temor por su sobrevivencia.
Que les limiten la posibilidad de ir al supermercado, de ir a sus citas médicas (porque en el camino hay protestas) para ellos debe ser muy difícil enfrentarlo.
Por ello el consejo para los adultos mayores es que se acojan a su red de apoyo, que hablen con sus hijos, vecinos, otros familiares y que puedan conversar de sus temores. Tan solo al verse con una mayor compañía y poder transmitir esa angustia, los ayudará a enfrentar mejor este periodo.
