¿Por qué el sector tecnología es una buena opción laboral para nosotras?

¿Por qué el sector tecnología es una buena opción laboral para nosotras?

El sector de la tecnología /digital es calificado como nuestro presente y futuro y se presenta como un área con múltiples opciones de aprendizaje y trabajo. Para conocer más de este sector conversamos con, José Tomás Lobo, city director de Laboratoria, entidad que capacita  a las mujeres interesadas en entrara a esta área.

Por Rebeca Ubilla M.

 

Sabías que los primeros programadores fueron mujeres? Así es, por esto el llamado hoy es a volver a liderar un área que el presente ocupan mayoritariamente hombres; Hoy, se necesita el aporte femenino en el sector, dado que “para crear  soluciones reales, estructurales, a los desafíos que estamos experimentando como sociedad, se necesitan equipos diversos”, recalca José Tomás Lobo, city director de Laboratoria, entidad que capacita a las interesadas en el área tecnológica /digital.   .

 – ¿Por qué hoy el área de tecnología / digital debiera ser una opción para las mujeres?

El área tecnológica es nuestro presente y, especialmente, nuestro futuro como sociedad, todos los ámbitos se van a ver impactados por ella, y las mujeres como mitad de la población que son, tienen que estar ahí, liderándola, creándola, probándola, mejorándola.

De acuerdo a estimaciones del BID, para 2025 se necesitarán más de 1.2 millones de desarrolladores de software en la región. En Chile para este año, el gap de programadoras y programadores es de 19.000 vacantes. Por otro lado, en Latinoamérica existen más de 40 millones de jóvenes que no tienen acceso a oportunidades de empleo o educación de calidad, de los cuales más del 70% son mujeres. Eso es una inmensa cantidad de talento desperdiciado para una industria que las necesita con urgencia, ahí donde se unen ambos factores y aparece Laboratoria.

– ¿Qué habilidades propias de las chicas las ayudan al desarrollarse en esta área?

No se trata de características propias de un género u otro, es que para crear  soluciones reales, estructurales, a los desafíos que estamos experimentando como sociedad, se necesitan equipos diversos. Se ha comprobado en varios estudios, incluso algunos realizados por la Universidad de Harvard, que los equipos con distintos pensamientos y opiniones ofrecen mejores resultados que los equipos en los que todos sus miembros tienen un background similar, es decir, son del mismo grupo etario, vienen de la misma universidad, la misma carrera, etc.; porque aportan experiencia, conocimientos e ideas que cambian la percepción y la forma en la que se abordan los problemas. Y nuevamente, cada solución o producto nuevo, o la mejora de algo que exista, deben estar pensada para atender a todo el mundo por igual, y las mujeres como mitad de la población mundial tienen que estar ahí.

– ¿Está el área tecnológica preparada para recibir la irrupción de mujeres en ella?

De hecho, fueron mujeres las primeras programadoras. Grace Hopper, Margareth Hamilton, Ada Lovelace, en diferentes tiempos, fueron las pioneras de la programación. Más que recibirlas, es volver a ese rol protagónico que deben tener. En los últimos años se ha incrementado la conciencia sobre el rol de las mujeres en la industria tecnológica, y la necesidad de que ellas estén presentes; pero aún falta abordar de manera estratégica y sistemática esta incorporación, es decir que más mujeres estén en puestos de liderazgo en empresas u organizaciones del sector; o fomentar el interés de las mujeres por estudiar carreras tecnológicas, por ejemplo.

– ¿Existen cifras que muestren la participación de la mujeres  en este sector?

Recientemente el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género y la ACTI (Asociación de Empresas Chilenas de Tecnologías de Información) publicaron cifras específicas para Chile, todas son muy llamativas, y dan cuenta de las acciones que debemos tomar ahora mismo, por ejemplo, la Industria Tecnológica está compuesta por un 5% de mujeres, solamente; además se estima que para este año, el gap de programadoras y programadores es de 19.000 vacantes, lo que deja un largo camino para recorrer.

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El Aprendizaje

– ¿Las chicas que entran a  Laboratoria qué aprenden? Qué título obtienen y cuánto dura la carrera?

 Entran a un bootcamp de 6 meses, el cual manejamos metodologías ágiles de enseñanza; apostamos al aprender haciendo, ya que recreamos espacios y proyectos de trabajo reales. Incluso creamos retos y desafíos con empresas que contratan el talento de nuestras egresadas como Accenture, Everis o Falabella, para que puedan evidenciar su talento en productos tecnológicos reales. Eso acelera el proceso de empleabilidad, porque no es lo que nosotros decimos que saben hacer, es lo que pueden demostrar realmente. Esto nos ha dado una empleabilidad por sobre el 80% durante los primeros 3 meses de egresar de cada generación.

 -¿Cómo es la experiencia de aprendizaje?

La experiencia de aprendizaje de cada estudiante va a ser determinada por ella misma, y aunque hay un segmento de contenidos comunes, donde aprenden conceptos y principios básicos de programación, posteriormente pueden elegir entre dos tracks: Front-End developers con foco en Javascript o UX Designers (diseñadoras de experiencia de usuario).

Uno de los elementos que más reforzamos durante toda esta experiencia es el ser autodidacta y dar continuidad a su formación tras Laboratoria. No buscamos crear desarrolladoras y diseñadoras con todos los conocimientos técnicos, incluso eso no sería posible considerando el tiempo de formación, pero sí queremos que más mujeres desarrollen habilidades cognitivas y psicosociales que les garanticen éxito en el mercado laboral.

Hoy en día contamos con un proceso de convocatoria abierta durante todo el año y las mujeres que quieren participar en el proceso de selección solo tienen que acceder a: convocatoria.laboratoria.la

 

– ¿Qué opciones laborales tiene una mujer que estudia ahí?

Tenemos un acompañamiento integral a nuestras egresadas, de hecho dentro de Laboratoria existe un área dedicada a generar espacios y conexiones con empresas para apoyar la inserción laboral al terminar el bootcamp, aquí en Chile nuestras egresadas están trabajando en empresas como Entel, Accenture, Everis, Falabella, Groupon, ComparaOnline, y otras más. En este momento nuestra tasa de empleabilidad de la última generación 86% y las egresadas han llegado a triplicar su ingreso mensual líquido. La mediana de sueldo de la última generación en Chile es de $810.000 líquido, lo que además tiene un crecimiento bastante rápido debido a la falta de profesionales que hay en la industria.

– ¿Cómo es la experiencia internacional en este tema?

Ser parte de Laboratoria es ser parte de una comunidad regional, que hoy día está en cuatro países de Latinoamérica y cinco sedes, (Ciudad de México, Guadalajara, Sao Paulo, Lima y Santiago) cuenta con más de 1000 egresadas, y te conecta con grandes empresas e instituciones de la región. Además estamos construyendo nexos con otras comunidades de mujeres en tecnología y entusiastas de la innovación y el emprendimiento, porque estamos convencidos que este trabajo no se hace en solitario.

Como parte del apoyo que damos a nuestras egresadas en su proceso de inserción laboral, hemos tenido casos en los cuales han ido a realizar prácticas laborales en instituciones como el BID, en sus oficinas centrales en Washington, lo que sin duda es una poderosa experiencia de vida.

– ¿En qué países las mujeres tienen alta participación en el mundo tecnológico?

La brecha de participación femenina en el área tecnológica es un fenómeno recurrente en todos los países del mundo, y más específicamente en Latinoamérica; no obstante de acuerdo a la OCDE, hay países que están fomentando que más mujeres estudien carreras STEM, como Portugal, donde el 58% de los estudiantes de ingeniería y computación son mujeres, o países como Suecia donde la brecha salarial es mínima en comparación entre hombres y mujeres. Creemos que tenemos la gran oportunidad de escribir el capítulo chileno de la industria tecnológica, donde creemos juntas una economía digital competitiva, diversa e inclusiva que entregue oportunidades para todas las personas.

 

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