Se viene un fin de semana largo que puede traer mucho relajo en la dieta. En esta nota podrás encontrar consejos para cuidar tu salud y la de tu familia.

Semana Santa se caracteriza por ser un período en que consumimos alimentos que pueden sacarnos de nuestra dieta habitual, sobre todo con la llegada del conejo de pascua y los huevitos de chocolate. Sin embargo, es posible lograr un equilibrio.

Esta fecha cae también en un fin de semana en que, por lo general, aumentamos el consumo de pescados y mariscos, los que tienen grandes beneficios. “Las carnes blancas son importantes fuentes de vitaminas y minerales, pero además algunas variedades nos entregan Omega 3 y ácidos grasos, que traen distintos beneficios para la salud cardiovascular. Entre ellos, se pueden encontrar pescados como la reineta y la merluza”, explica la nutricionista de Clínica INDISA, Dana Bortnick.

Un punto crucial para que sean saludable es su preparación, ya que “de nada sirve comer pescado frito, puesto que este tiene un alto contenido de grasas saturadas. Siempre recomiendo cocinar los pescados a la parrilla, a la plancha con agua o una gota de aceite de oliva, o al vapor. Así pueden ser de libre consumo y no hay problema, ya que traen hartos beneficios a nivel nutricional”, agrega la especialista.

Asimismo, un gran éxito en estas fechas son los huevitos de chocolate, especialmente entre los niños. La experta de Clínica INDISA puntualiza que “ojalá que este tipo de alimento no se le dé a niños menores de 5 años, ya que todavía son muy pequeños”. Para el resto de las personas, recomienda que “tanto para grandes como chicos, si se va a consumir chocolate, sea uno con altos niveles de cacao, ojalá sobre 50%, y con bajo contenido de grasa y azúcar”.

“Si esto no es una opción, ya que muchos niños reciben de regalo distintos chocolates, lo mejor que se puede hacer es limitar el consumo a no más de cinco huevitos diarios. Parece poco, pero la cantidad de azúcar que contiene cada uno de estos huevos puede llegar a alcanzar la cuota máxima de un niño pequeño”, precisa Dana Bortnick.