Desde su llegada en la década de los 60, las pastillas anticonceptivas se han instalado como el método más usado por las mujeres. Sin embargo, son variados los mitos que aún persisten en la actualidad. Aquí, te ayudamos a desmentir algunos de ellos.
De acuerdo con el estudio publicado en julio de 2022 por la prestigiosa revista médica The Lancet[1], la pastilla anticonceptiva es el método más utilizado por las mujeres en Chile, alcanzando un 33,6%. Aunque la popularidad de este método puede variar de un país a otro, la píldora anticonceptiva continúa siendo uno de los principales métodos de prevención del embarazo a nivel mundial.
Sin embargo, y pese a su amplio uso, en la actualidad aún persisten una serie de dudas y mitos acerca de los efectos que puede generar en el organismo, su seguridad y eficacia.
¿Cuáles son los mitos más comunes sobre las pastillas anticonceptivas?
En relación a los principales mitos, la Ginecóloga Obstetra de la Universidad de Chile y presidenta de la Sociedad Chilena de Endocrinología Ginecológica (Socheg), Marcela López, se refiere a algunos de ellos y entrega una serie de informaciones y recomendaciones sobre su uso.
- Las pastillas anticonceptivas hacen engordar.
Los efectos de las pastillas anticonceptivas en el peso es materia de debate constante. En 2017, una revisión de más de 40 estudios en la materia, indica que los métodos anticonceptivos como la píldora, anillos vaginales y parches no impactan significativamente en el peso de las mujeres. De hecho, muchas mujeres ganan peso a lo largo de los años utilicen o no estos métodos anticonceptivos[2]. Así lo reafirma la Dra. López y señala que “los estudios publicados hasta la fecha no han demostrado asociación entre el uso de pastillas anticonceptivas y aumento de peso en las usuarias”.
- Las pastillas anticonceptivas disminuyen el libido.
Según la especialista, las pastillas anticonceptivas suprimen o disminuyen la producción hormonal de la mujer, lo cual solo en algunas ocasiones puede influir en la libido de la usuaria. Asimismo, asegura que no se debe olvidar “que en la libido influyen múltiples factores y uno de ellos es el estado hormonal. Cambiando la dosis del anticonceptivo, la composición de este, o utilizando un progestágeno con efecto androgénico, este efecto puede ser minimizado o manejado”. En este sentido, lo importante es consultar con el médico y encontrar el anticonceptivo más adecuado para cada mujer.
- Las pastillas anticonceptivas afectan a largo plazo la fertilidad.
Falso. Quizás hayas escuchado esto en múltiples ocasiones, sin embargo, no es verdad. Los anticonceptivos hormonales, como la píldora, no causan infertilidad ya que están diseñados para prevenir embarazos de forma temporal, durante el tiempo que se utilicen y no tienen efectos permanentes en este sentido.
El uso de anticonceptivos, independientemente de su duración y tipo, no tiene un efecto negativo en la capacidad de las mujeres para concebir después de la interrupción del uso y no retrasa significativamente la fertilidad[3]. “Hay estudios que demuestran que usuarias sanas de anticonceptivos orales que los suspenden, se demoran menos en embarazarse que mujeres sanas de la misma edad que no los usan. El principal factor que afecta la fertilidad es la edad, y no el tiempo, ni el uso del anticonceptivo”, señala López.
- Las pastillas anticonceptivas previenen las infecciones de transmisión sexual (ITS).
FALSO. Debes tener en cuenta que mientras la píldora es efectiva para evitar embarazos no deseados, no protege contra infecciones de transmisión sexual (ITS)[4]. En realidad, la única manera 100% efectiva de prevenir el contagio es evitando el contacto sexual. Sin embargo, para practicar sexo seguro y disminuir la probabilidad de transmisión de infecciones, la recomendación es utilizar métodos de barrera como el condón.
- Las pastillas anticonceptivas afectan negativamente el estado del ánimo.
FALSO. Según la visión de la especialista, no hay estudios que demuestren una asociación directa entre el ánimo y las pastillas anticonceptivas. Incluso existen formulaciones que tienen efectos en el sistema nervioso central, lo que influye positivamente en el ánimo y serían de elección en mujeres con antecedente de algún trastorno del ánimo[5].
Adicionalmente, el consejo principal de la Dra. Marcela López es asistir a control con un profesional especializado, ya sea para inicio de un método anticonceptivo, mantención o ante el deseo de suspenderlo por algún efecto no deseado u otro motivo.A su vez,enfatiza que “como profesional de salud debemos presentarle a la usuaria todos los métodos existentes, beneficios, riesgos y modo de uso de cada uno de ellos y la mujer podrá elegir, luego de esta adecuada consejería, la opción que más se adapte a sus deseos y necesidades, si no existe una contraindicación”.
