Colombia: Conociendo Santa Marta en un día

Colombia: Conociendo Santa Marta en un día

Rodeada de playas, saqueada por piratas durante años y dueña de una cultura indígena con tradiciones aún vigentes, esta ciudad colombiana ofrece paisajes, sabores y aventuras.

Fer HidalgoPor Fernanda Hidalgo

Entre una vegetación exuberante y el caos de sus calles, así se vive Santa Marta, una ciudad costera ubicada en el departamento de Magdalena, en Colombia. Si bien es una ciudad pequeña, es un gran destino turístico caribeño, ya que permite disfrutar de los atractivos locales y además actúa como punto de salida perfecto para conocer lugares un poco más alejados como el Parque Tayrona, Minca o Palomino.

Pero hoy te contaré sobre las cosas que puedes hacer dentro de la ciudad, para que le saques provecho a tu día en Santa Marta.

Recomendaciones iniciales

Jejenes (1)Primero lo primero, para viajar a Colombia necesitas tener la vacuna de la fiebre amarilla, incluso podrían llegar a pedírtela para ingresar a algunos de los parques del área selvática. La inyección tiene un costo aproximado de $60.000 (2019) y tienes que obtenerla con anterioridad, ya que tiene un lapso de activación de al menos dos semanas.

Segundo, busca un alojamiento que tenga aire acondicionado, porque créeme, lo vas a desear luego de estar en la calle un par de horas.

Por último, compra un buen repelente. COMPRA UN BUEN REPELENTE! Busca uno que te proteja no solo contra los zancudos, también de los jejenes que son unos mosquitos diminutos, ni los ves, pero la picazón que generan, las ronchas y las marcas que quedan después te harán pensar que te caíste por las escaleras.

Ahora a lo que vinimos, un día en Santa Marta

Puedes iniciar tu paseo temprano en la mañana con una caminata por la costa y recorrer Carrera 1 antes de que el calor y la humedad te hagan querer volver a tu hotel. Luego, una cuadra más adentro, en Carrera 2 con Calle 13, encontrarás el Museo del Oro Tayrona – Casa Aduana, un lugar imperdible, con una arquitectura que se mantiene, un patio interior hermoso y balcones que dan a la calle. En este museo podrás observar objetos de los pueblos indígenas de la zona, sus costumbres, tradiciones y algunas piezas de orfebrería; sus salones también te llevarán por un viaje de pueblos ancestrales, colonización, piratas e independencia. Si realmente te gusta la historia y conocer sobre la cultura, te recomiendo reservar un par de horas para recorrer con tranquilidad.

Museo Tayrona (1)

Si ya te dio hambre, no puedes perder la oportunidad de probar la gastronomía local, como los patacones y el cayeye, un plato muy típico de la zona de Magdalena. Para arrancar del calor, una muy buena opción es ir a la Muzzería, que se ubica en Carrera 3 con Calle 16, a pocas cuadras del museo. ¿Recomendación personal? Pide la Kokilla mixta, este cayeye viene con una base de puré de guineo verde, trozos de lomo y pollo salteado con champiñones, cebolla caramelizada, crema de salsa criolla y terminada con queso parmesano gratinado y suero… Ñamiiii!

Cayeye (1)

Para terminar este recorrido diurno por el centro histórico, en Carrera 5 con Calle 16 encontrarás la Catedral Basílica de Santa Marta, una construcción con mucha historia y que alberga los restos del fundador de la ciudad, Rodrigo Bastías. Además, durante 12 años fue el lugar de sepultura de Simón Bolívar, quien hoy descansa en Venezuela.

Otra cosa es Santa Marta de noche, cuando cae el sol y la vida nocturna sorprende. Tanto samarinos como turistas se reúnen en la Plaza de los Novios, en Carrera 3 con Calle 19, y toman algo en alguno de los pequeños bares que la rodean. Hacia el este de la plaza también tienes un par de cuadras con varios resto-bares, con mesitas interiores y exteriores, donde podrás disfrutar de algunos espectáculos callejeros, estatuas humanas, grupos de baile y música.

Basílica (1)

Y como siempre debe haber un bonus, aquí te dejo dos!

Para estos paseos necesitas tener un poco más de tiempo, ya que quedan alejados de la ciudad y necesitarás caminar un poco.

  • Cabo Tortuga

Un lugar tranquilo, sin muchos vendedores, arena suave, agua tibia y no tan concurrida como Rodadero, eso es lo que encontrarás en Cabo Tortuga.

Esta playa queda al sur de Santa Marta y es necesario que tomes un bus en Carrera 1 para que te lleve. Lo más conveniente es preguntarle al conductor y pedirle que te avise cuando llegues al lugar, ya que parecerá que te bajas en medio de la carretera, luego de un viaje de 30 o 40 minutos. Para ingresar a la costa, debes rodear el complejo hotelero y entrar por un estrecho camino de tierra con cercos de alambre, la caminata no es de más de 10 minutos y el lugar vale la pena, totalmente.

Camino Cabo Tortuga (1)

  • Palomino

Las primeras imágenes que verás en internet serán las de una playa desierta con palmeras, y lo único que querrás es ir a visitarla. Debes tomar un bus en el mercado de Santa Marta, en Carrera 9 con Calle 11, y prepararte para un viaje de una hora y media. Cuando llegues, deberás atravesar el pueblito entre hostales, pequeños restoranes y puestos de artesanías.

Al legar a la costa, camina hacia tu izquierda, pasaras por varios restoranes costeros donde podrás elegir tú misma que pescado comerte y su preparación (sí, te lo llevan a la mesa antes de cocinarlo).

Luego de un almuerzo reponedor sigue caminando hacia la izquierda, encontrarás una zona donde todas las personas arriendan una especie de privado con sombra donde pueden dejar sus cosas. No te quedes ahí, yo te aconsejo seguir caminando y cruzar el río, ya que al otro lado no hay nadie! Está lleno de palmeras y ardillas! Sí, ardillas que trepan las palmeras.

Una cosa importante, las olas son bastante fuertes y por eso la playa no es apta para el baño, pero si te quedas en la orilla o en el río, igual puedes pasar un buen rato. Sigue siendo un imperdible.

Algo muy importante que debes recordar es que el bus de vuelta a Santa Marta pasa a las 18:00, no lo pierdas!

Como ves, en Santa Marta tienes de todo para disfrutar un par de días: rica comida, playas, cultura y diversión.

Las temperaturas más bajas se encuentran entre junio y julio, pero aún así, siguen siendo altas, por ejemplo: yo estuve entre el 21 de junio y el 14 de julio, con temperaturas entre los 25° y los 32°, con una sensación térmica de 38° y una humedad de 72%. Así que prepárate para disfrutar de un buen clima todo el año!

 

 

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