Al llegar las vacaciones nos olvidamos de los horarios y por ende de nuestra rutina de comidas, esto puede generar desórdenes en el sistema digestivo e incluso aumento de peso. Seguir horarios, controlar porciones de hidratos de carbono, evitar desayunos abundantes y hacer aperitivos saludables son algunos de los consejos que entrega la nutricionista de ISS Chile, Bianca Mira.

El verano es la época favorita de muchos, ya que descansamos y nos olvidamos de las preocupaciones. Si bien el panorama parece perfecto, nuestro cuerpo sufre graves consecuencias por dejar de lado la rutina de alimentación que tiene durante el resto del año.

Desde marzo y hasta casi todo el mes de diciembre, seguimos pautas, hábitos y costumbres que nos ayudan a llevar una alimentación ordenada, esto además de mantener nuestro peso, evita problemas digestivos y mejora nuestra salud mental y corporal. Sin embargo, en verano ocurre el efecto contario, donde es común que nos saltemos comidas y no respetemos horarios.

Para hacer la tarea un poco más fácil y evitar pasar malos ratos en nuestras vacaciones, la nutricionista de ISS Chile, Bianca Mira, entrega seis consejos para ordenarnos en este periodo:

Seguir horarios: Vivir sin preocuparse del reloj es sinónimo de felicidad, no obstante, puede afectar a nuestros hábitos alimenticios. Es importante que, independiente de que estemos en modo de relajo, tengamos en consideración que nuestro cuerpo necesita comer cada 3-4 horas e hidratarse constantemente.

La especialista recomienda llevar siempre una botella de agua y colaciones cuando ameriten. De esta manera se evitarán periodos largos sin comer y nuestro cuerpo estará hidratado y sobrellevando de mejor manera las altas temperaturas.

Evitar desayunos abundantes: Comer rico es un hecho en vacaciones. A pesar de tener tentaciones, lo ideal es que no nos olvidemos de incluir frutas y verduras frescas, fibra y lácteos. Esto hará que nuestra primera comida del día nos aporte los nutrientes suficientes para evitar el estreñimiento y subidas de peso. Además nos hará sentir más satisfechos.

Controlar carbohidratos y frituras: Durante el resto del año nos preocupamos de comer saludable, pero al llegar el calor y el relajo siempre se da lugar a las comidas altas en carbohidratos. Si bien es prácticamente imposible dejarlas de lado, y tampoco es saludable para nuestro cuerpo, se debe hacer el esfuerzo por controlar la ingesta a medida que transcurre el día. Es decir, siempre incluirlos en el desayuno y almuerzo y evitarlos o disminuir las porciones en la media tarde y cena.

 Comer en casa: Más de una vez nos hemos percatado que después de una salida a comer terminamos con dolor de estómago, esto ocurre porque nuestro cuerpo no está acostumbrado a algunos condimentos. Por lo mismo, se recomienda cocinar en casa y así tener un total conocimiento de qué estamos comiendo. De esta manera evitaremos malestares y ahorraremos dinero considerablemente.

 Aperitivo saludable: En vez de sentarnos y comer en la mesa, hay veces que optamos por gigantescos aperitivos. En estas instancias, además de que usualmente nos pasamos de la porción sugerida, consumimos más sodio del que nuestro cuerpo necesita, esto por los componentes que tienen los productos envasados.

Por lo mismo, se recomienda incluir siempre frutas y verduras frescas, las que en esta época del año, suelen tener mejor sabor y textura.