Por: Elizabeth Salazar T.
Este jueves se estrena la tercera película del mítico personaje Willy Wonka. Basada en el libro infantil de Roald Dalh, esta vez, la historia se centra en el origen del protagonista, nos muestra a Willy Wonka (Timothée Chalamet), un joven que atesora un gran sueño, quiere conquistar al mundo con el sabor de sus chocolates. Sin embargo, cuando llega a un pueblo lleno de aspiraciones para triunfar, su camino se verá truncado por diferentes personajes que lo ven como una amenaza.
Escrita y dirigida por Paul King (“Paddington”), la película apela al humor y la ternura. Vale precisar que esta versión es concebida como la precuela de las dos adaptaciones que en décadas anteriores llegaron a la pantalla grande: “Willy Wonka y la fábrica de chocolate” de 1971 y “Charlie y la fábrica de chocolate” de 2005. Es entretenida e ideal para ver en familia, la trama tiene muchas moralejas sobre la amistad, el trabajo en equipo, perseguir los sueños, enfrentar los temores, entre otros temas que podemos ver bajo la perspectiva de niños y adultos.
Cabe señalar que cuenta con un elenco de lujo. El protagonista, Timothée Chalamet, utiliza todo su encanto y carisma para interpretar al bonachón e ingenioso Wonka. Olivia Colman es la Sra. Scrubbit, la dueña de una hostal donde sus hospedados están cumpliendo un particular contrato, la actriz está muy bien en su papel, es detestable y algo divertida. Sumado a ellos, no podían faltar los Oompa-Loompas, son de los personajes más recordados por quienes han seguido tanto las películas como los libros y en esta ocasión, Hugh Grant interpreta a uno muy peculiar que está conectado con Wonka por un evento fortuito; el actor se ve graciosísimo como el pequeño personaje, sacará más de una sonrisa. A ellos los acompaña Caleh Lane, quien interpreta a Noodle, una niña astuta que entablará amistad con Wonka, ambos conectan y se complementan generando una dupla entrañable y ella está muy bien en su rol y por último, Rowan Atkison como el padre Julius, sólo verlo resulta gracioso.
Su ambientación con hermosos paisajes nos sumerge en un cuento con personajes buenos y siniestros. Además, la música y el baile son elementos muy importantes en el desarrollo de este film, puesto que, incluye algunas escenas musicalizadas con canciones nuevas y antiguas. Realmente el resultado es bueno, es un agrado ver las coreografías, tienen mucho colorido y canciones alegres.
Una película ideal para ver en familia y pasar un muy buen rato con toda la dulzura de Wonka, su historia les va llegar al corazón. Para ver y disfrutar.
Director: Paul King
Duración: 117 Minutos.