“Supongamos que Nueva York es una ciudad”: la particular mirada de Fran Lebowitz y la risa de Martin Scorsese

“Supongamos que Nueva York es una ciudad”: la particular mirada de Fran Lebowitz y la risa de Martin Scorsese

Por: Elizabeth Salazar T.

Es la reciente miniserie de Netflix, en la que podemos ver al destacado director de cine Martin Scorsese, mantener una distendida conversación junto a la escritora Fran Lebowitz, quienes desmenuzan lo que implica vivir en la ciudad de Nueva York. Las reflexiones de Fran acerca de temas como la salud, el dinero, el transporte y las bibliotecas (destaca su amor a los libros), les sacarán más de alguna sonrisa. Es el mismo Scorsese quien dirige, hace de productor, e inclusive en algunos momentos de entrevistador, y definitivamente, es quien más disfruta escuchando a Fran, sus carcajadas son habituales en cada episodio. Los une una amistad de años, de hecho Fran aparece como jueza en “El lobo de Wall Street” (2013) y además, es la protagonista del documental “Public speaking” (2010), dirigido por Scorsese.

Con un estilo de humor muy negro, perspicaz, incluso -a ratos diría que-, hasta medio hater, Fran comparte sus pensamientos con el director y con otras destacadas figuras del medio cinematográfico, puesto que, se pueden ver extractos de entrevistas que le han realizado en programas el actor Alec Baldwin, la actriz y directora Olivia Wilde y al director Spike Lee; todos caen rendidos y encantados ante los dichos de Fran, es inevitable.

La miniserie consta de siete capítulos, los que se pasan rápidamente, pues cada uno tiene una duración de 30 minutos aproximadamente, donde se exhibe una entretenida mirada sobre esta ciudad, considerada como uno de los mejores lugares del planeta y que inspiró diversas composiciones de  grandes artistas, y tal como cantaba Frank Sinatra, es “la ciudad que nunca duerme”. Sin embargo, para otras personas como Lebowitz, a pesar de lo maravillosa que puede llegar a ser, también posee muchos aspectos negativos como por ejemplo, lo costosa que resulta para vivir y lo malo que puede ser el transporte público.  A pesar de sus virtudes y defectos, Nueva York es muy querible.

Seguro van a pasar un buen rato viéndola y tal vez, incluso, reirán más que Scorsese.

Categories: Series