Chile está posicionado en el segundo lugar a nivel global en actividad emprendedora en su etapa inicial, según el Informe de Competitividad Global (IMD). Esta señal indica que las startups chilenas están reuniendo condiciones para saltar las fronteras y expandirse a nivel global. El inglés abre la posibilidad de tener una comunicación fluida con 700 millones de personas de todo el mundo.

La accesibilidad de la tecnología actual ha impulsado que cientos de startups chilenas se decidan a saltar las fronteras y extenderse hacia otros países. Y no solo en América. Inversionistas de Europa y Asia se suman a la red dispuesta a apoyar nuevas iniciativas nacidas en Chile.

En efecto, la actividad emprendedora chilena, en su etapa inicial, marcó un hito en el Informe de Competitividad Global IMD, al posicionarse segunda a nivel global. Esto, a pesar de que la competitividad general del país quedó en el puesto 44 en el ranking.

“Salir de Chile con un negocio significa hablar de igual a igual con inversionistas de Singapur, Malasia, Estados Unidos, y muchos otros países con quienes la comunicación es en inglés”, dice Pablo Parera, Gerente General de EF Education First Chile.

Defender una idea y negociar en un idioma extranjero es una competencia vital para todos quienes llevan adelante una startup. Rondas de inversión, encuentros uno a uno y webinars se realizan en inglés a fin de conectar personas de países de los cinco continentes. Para dimensionarlo, el inglés es la lengua materna de 340 millones de personas en el mundo, y una cantidad similar lo habla como segundo idioma.

“Traer talentos de afuera también es vital para el desarrollo de ideas de negocio que son especialmente innovadoras. Tener un idioma en común también juega un rol en la conformación de nuevos equipos”, señala Pablo Parera.

El levantamiento de capital extranjero ha llevado a startups chilenas a crecer rápidamente y aspirar a convertirse en unicornio, es decir, valorizarse por sobre los US$1000 millones en sus primeras etapas de crecimiento.

“Crear una red de contactos a nivel global implica establecer vías de comunicación efectiva que permitan generar confianza para trabajar en conjunto en una nueva idea. Esto significa un manejo idiomático más rico y expresivo que el que se aprende de manera tradicional en Chile”, indica Parera.

Nuevas iniciativas apoyan a startups a comunicarse con inversionistas de todo el orbe. Viajes grupales y programas Executive están disponibles a la medida de cualquier persona que desee ampliar sus oportunidades en hasta 54 destinos diferentes.

“Si bien el inglés es el idioma más usado a nivel global, otros idiomas como el alemán y el coreano están en la mira de los nuevos negocios, y es posible aprenderlos en viajes de estudios que permiten aplicar conocimientos en el país y la cultura donde se hablan cotidianamente”, concluye el ejecutivo.