- Una de cada 8 mujeres podría desarrollar un cáncer de mama a lo largo de su vida, convirtiéndose en el cáncer que más mortalidad provoca en la mujer.
- La reconstrucción mamaria tras una mastectomía se incorporó a la canasta de patologías Auge-GES en el año 2006, por lo que cada día más mujeres tienen acceso a esta operación que logra mejorar su calidad de vida.
Toda mujer mayor de 40 años sabe que debiera realizarse controles médicos periódicamente, pero son muchas quienes no hacen esta rutina, exponiéndose a desarrollar un cáncer mamario y poner en peligro sus vidas.
El cáncer mamario es, básicamente, el crecimiento anormal y desordenado de células del tejido mamario, formando un tumor maligno que inicialmente se ubica en la mama, pudiendo extenderse a otros órganos, si no es tratado a tiempo.
Las consecuencias de las pacientes que han sufrido cáncer de mama y se han sometido a una mastectomía son innumerables, dejando heridas tanto físicas como psicológicas que suelen generar un daño en la autoestima de la paciente.
Ante esta situación, el cirujano plástico, doctor Roberto Prado (médico perteneciente al staff de clínica Indisa, Universidad de Los Andes y Lo Curro), señala que “las mujeres que se someten a una mastectomía por cáncer, generalmente sufren un menoscabo en su femineidad, en su relación como mujer con el mundo, ya sea con otras mujeres o con su pareja, por lo que el poder hacer una reconstrucción mamaria es algo fundamental, lo que ayuda considerablemente en su calidad de vida”.
Si bien, desde el aspecto sicológico es recomendable realizar la cirugía reconstructiva al momento de la misma mastectomía, para que la paciente no alcance a dimensionar lo que fue retirar parte de su cuerpo, el profesional señala que “en el caso de las pacientes que deban recibir radioterapia en el periodo post operatorio, es recomendable esperar entre 6 meses y un año terminado este tratamiento, ya que puede alterar el resultado de la cirugía reconstructiva, por lo que es prudente dar tiempo a que los tejidos sanen”.
Pero no siempre una sola cirugía basta para reconstruir la mama, “el protocolo habitual es en un primer tiempo hacer la reconstrucción referida básicamente al tamaño, al volumen de la mama y se deja para un segundo tiempo la reconstrucción de la areola y el pezón”, explica el doctor Roberto Prado, quien agrega que “muchas veces también hay otras cirugías por retoques que son necesarios para mejorar algún detalle estético, que puede no haber sido satisfactorio en un primer momento”.
Sin embargo, ante un cáncer de mama el tratamiento no siempre es una mastectomía total, hay otras alternativas menos invasivas como es la tumorectomía, que consiste básicamente en sacar el tumor, “pero deben ocurrir algunas circunstancias especiales como que el tumor sea pequeño, que no sea de una histología especialmente agresiva y que tenga una mama de un tamaño suficiente para que tenga un buen resultado”, advierte el cirujano plástico.
Es por esto que el llamado es a la prevención y realizarse los exámenes pertinentes, en especial a las mujeres mayores de 40 años o que han tenido antecedentes familiares de esta enfermedad.