Por: Elizabeth Salazar T.

Llega el debut como directora y escritora de la actriz Zoë Kravitz, con un thriller que al comienzo nos parece idílico, pero el sueño se va tornando en una pesadilla. Trata de un multimillonario del sector tecnológico Slater King (Channing Tatum), que conoce a la mesera Frida (Naomi Ackie) en su gala benéfica, donde surge una fuerte atracción entre ambos. Él la invita a unirse a él y a sus amigos en unas vacaciones de ensueño en su isla privada. Es el paraíso. Las noches salvajes se mezclan con días bañados por el sol y todos se están divirtiendo mucho. Nadie quiere que este viaje termine, pero a medida que pasan los días, empiezan a ocurrir cosas extrañas, por lo que Frida comienza a cuestionar su realidad. Algo anda mal en este lugar… Tendrá que descubrir la verdad si quiere salir viva de esta fiesta.

Esta película ha despertado mucho interés, tanto por ser la ópera prima de Zoë Kravitz y también, por su trama, que nos parece al inicio una comedia romántica, que se va convirtiendo un drama terrorífico. Y aunque al principio parece que las huéspedes del lugar fueran parte de una secta o algo parecido, debido a que todas las mujeres visten de la misma forma, les regalan vestimentas, que curiosamente son todas de color blanco. Los días pasan entre masajes, cuidados de belleza, alcohol, drogas y diversión, pero las noches… Son aterradoras. Con mucha astucia femenina Frida descubrirá la verdad de lo que pasa. Y busca una partner Sarah (Adri Arjona), con quien unirán fuerzas para tratar de salir del lugar.

Con una trama muy feminista, esta película muestra que la unión femenina es poderosa, capaz de derribar a grandes. Frida es valiente, resiliente, debe luchar con sus temores y tratar de sobrevivir. Una excelente actuación de Naomi Ackie, es increíble como la gestualidad de su personaje cambia y su actitud, también. Channing Tatum, es creíble con un personaje que se muestra galán, amable, pero su lado oscuro es perverso, el dinero y el poder, le dan acceso a todo… Bien Adrie Arjona como Sarah, un personaje que igualmente tiene una evolución. En el elenco además están Geena Davis como Stacy, una asistente algo extraña… y Haley Joel Osment (Sí, el niño de “Sexto sentido”), como Tom, un fiestero total.

Aunque a ratos se siente una película un poco dispersa, por la cantidad de temas que trata, a medida que la vamos procesando, nos damos cuenta, que la violencia y las escenas sangrientas, no son lo importante. Es llamar a la unión femenina, juntas siempre conseguimos más, somos más poderosas.

Bien por el debut cinematográfico de Zoë Kravitz, con mucho suspenso, nos entrega una alegoría femenina.

Desde el 22 de agosto en cines.

Directora: Zoë Kravitz

Duración: 103 Minutos.

Distribuye: Warner Chile.