Según estudio sobre el Impacto de la Industria Farmacéutica en Chile, un 49% de mujeres ya son parte activa en dicho sector.

Posee además uno de los mayores niveles de sueldos promedio, sólo superado por los sectores minería y electricidad y gas.

De acuerdo con el último estudio sobre el Impacto de la Industria Farmacéutica en Chile realizado por el profesor Rodrigo Harrison  de  la Universidad Adolfo Ibañez titulado “Impacto de la Industria farmacéutica en Chile“- The Economy Footprintt, el año 2020, esta cuenta con una participación de un 49% de mujeres, cifra levemente superior a la participación femenina en su equivalente europeo (46%), y muy por sobre el promedio de la industria manufacturera chilena (34%). Posee además uno de los mayores niveles de sueldos promedio, sólo superado por los sectores minería y electricidad y gas, siendo más del doble del sueldo promedio en Chile y que el sueldo promedio en el sector manufacturero.

Las mujeres en esta industria han demostrado ser un gran aporte en temas de productividad, retención de talento, calidad y rentabilidad. No obstante, se debe seguir trabajando en políticas públicas, y en el campo laboral para garantizar la equidad de género en toda la cadena productiva. Tres destacadas profesionales del rubro que pertenecen a laboratorios asociados a Asilfa cuentan su experiencia.

Marcela Sabaini, químico farmacéutico y gerente general Eurofarma, comenta que “si bien en la universidad la carrera de químico farmacéutico es bastante mixta, el tema cambia con la especialización. Algunas tienen una visión más productiva, otras más enfocadas en la operación, y aquí es donde los hombres han ido tomando un rol mayor. Hacer carrera ha sido difícil para nosotras. Hasta hace pocos años, la mayoría de las vacantes buscaban hombres y las preguntas para postular a un trabajo eran: ¿estás casada?, ¿tienes hijos?, ¿cómo lo vas a hacer? ¿Cómo vas a estar fuera de la casa? En este sentido, las compañías se autolimitaban para que la continuidad de sus negocios no se viera afectada”, comenta.

Pero hoy esto está cambiando, dice la gerenta de Eurofarma. “Las habilidades de la mujer en distintas posiciones, ya sea de liderazgo, gerenciales o dirigiendo un grupo de personas son claves dentro de las organizaciones. Esto está sumamente demostrado en diversos estudios, la forma de liderar, de aportar a la productividad, es muy positiva. Es lo que se ha visto en el último tiempo y cada vez más las industrias buscan la paridad”.

Al respecto, destaca que en el rubro farmacéutico como en el resto de los sectores, la visión de equidad debe ser la base. “Es muy importante que los procesos dentro del sector se vayan revisando para asegurarnos que la equidad sea como tiene que ser. Para generar espacios de cambio y liderazgo son fundamentales dos cosas: uno, se debe estar dentro del proceso de la empresa y dos, dentro de la formación de los líderes de la compañía”.

Por su parte, Guiselle Ramos, Encargada de Licitaciones Bagó, comenta que independiente que se ha avanzado en el tema de equidad de género, aún las mujeres en la industria deben seguir demostrando que son capaces y que tienen las mismas capacidades que un hombre. “Aún existen desventajas en este punto  y en varios rubros es notorio. Como muchas mujeres, algunas veces me encuentro demostrando que puedo hacer lo mismo o más que un hombre. Sin embargo, hoy me encuentro en un área en donde el rol de la mujer se destaca, y reconoce, pues somos una pieza clave en el desarrollo farmacéutico y merecemos tener las mismas posibilidades de crecimiento y ascenso. Somos creativas, asertivas, precavidas, empáticas, cualidades que sumadas a nuestro pensamiento crítico, son claves para ser un agente de cambio y liderazgo”

Si consideramos según estudio ‘The Economic Footprint’, que la industria farmacéutica chilena anualmente mueve alrededor de US 1.800 millones, equivalentes al 0,73% del Producto Interno Bruto (PIB) y genera alrededor de 68 mil puestos de trabajo, el rol femenino en ella es una tendencia que poco a poco va al alza.

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