Desde hace años crea en papel maché, pero hoy gracias al tiempo que nos ha dado estos meses en casa, lo ha podido trabajar en exclusiva en su taller. En él ha dejado fluir sus emociones para dar vida a lindas figuras llenas de significado que no buscan la perfección, sino revalorar lo diferente.
Por Rebeca Ubilla M
Durante mucho tiempo, María Inés Corvalán, – secretaria de profesión- estuvo temerosa de mostrar lo que hacía, pero en esta pandemia -tras quedarse sin su trabajo en el aeropuerto- se decidió a dar un impulso mayor a su arte, luego de volver a conectarse con su mundo interior y segurizarse, proceso que incluyó sesiones de coaching.
Así, sus manos volvieron al papel maché para dar vida a maceteros, casas, muñecas y sillas. Estas últimas con un especial significado, que ella misma explica: “éstas simbolizan la espera que hemos tenido en este tiempo, período que no ha sido para estar de brazos cruzados, sino que ha dado la posibilidad de observarte, a ti y a tu entorno, a tu vida y detenerte… no es un adorno, es un símbolo de esta pandemia”.
Es así, como el arte siempre ha estado ligado a la vida de María Inés -51 años, dos hijos- a través de la realización de distintos talleres de los que ha formado parte: óleo, ilustración, batik, dibujo de carbón y figura humana y cerámica, entre otros. Le gusta aprender, investigar nuevos procesos para ver qué puede incorporar a su creaciones.
-¿Cómo te iniciaste en e trabajo del papel maché?
-Mis inicios en el papel maché se remontan a hace unos años atrás cuando estudié Licenciatura en Arte y tuve la oportunidad de trabajarlo y crear máscaras. De inmediato me gustó mucho, porque soy una persona muy perfeccionista y el papel maché te obliga a aceptar y soltar la imperfección y eso me gustó mucho. Tener la libertad de crear sin fijarte tanto en los detalles, en la imperfección de tu creación y dejarte llevar y soltar tus emociones, tu sentir en el papel con plena libertad.
El 2010 fui alumna de Mariana Vilches -en hoy taller Piedra Blanca (@taller_piedra_blanca) – donde ella me enseño toda su técnica, todo su trabajo y ahí terminé de enamorarme del papel, de su versatilidad, de todos sus usos y hubo una conexión con todos los materiales de desecho que se pueden transformar y ocupar y reutilizar y eso me atrajo mucho. … Empecé a estudiar el papel, ver qué usos se le podía dar y cómo se podía transformar
-¿Cúando partiste a hacer cosas para el público?
-El 2017 entré a Instagram y di con la página de Las chicas de Laralá, las que tienen una feria navideña virtual. Quise probar la aceptación de lo que yo hacía y mandé las fotosd e unos maceteros de papel… la sorpresa fue que quedé y no tenía nada hecho para la venta. Fue muy sorpresivo ver que había gustado lo que yo hacía y así me puse a trabajar y hacer maceteros de papel y a hacer reproducción de suculentas…Hoy estoy full dedicada a mi trabajo y quiero seguir en ello y consolidarlo y seguir conectándome con los sentimientos a través de mis figuras.
-¿Qué es lo que más te gusta de trabajar el papel maché?
-Además del papel Maché, trabajo con carta pesta y pulpa de aserrín, son las tres técnicas que me han enamorado. Son trabajosas y hay que procesar el papel… crear una pasta q se siente en las manos y dar la forma. Es un proceso que requiere tiempo, que es lo que tenemos hoy. Hay una observación más profunda del proceso de creación y eso te los dan los materiales que no son tan instantáneos. Además, estos materiales son sustentables. Eran de desecho por lo que te invitan a ser amigables con tu planeta.
También, son materiales que te invitan a que la imperfección de tu creación también tiene una belleza. Hoy se aspira a toda la perfección… pero hay que mirar lo diferente y dar un enfoque distinto y eso es muy bonito.
¿Qué te inspira en tu trabajo?
-Me inspiro en personas, por ejemplo una chica cuya cuenta en Instagram es @ser_depapel … son sus emociones creadas en sus seres de papel. También la cuenta de @carnavareladolls, que hace muñecas con colores fuerte que son un torrente de energía. Me inspira mucho su fuerza. También hay cosas que me inspiran como mis propios procesos y vivencias de mi lado infantil. Estoy en un proceso de dejar salir mi niña interior
Este tiempo de pandemia ha sido maravilloso para reconectarme con mis creaciones, para poder dedicarme a hacer lo que me apasiona, me gusta y gratifica. Me siento muy agradecida de poder trabajar con mis manos y contar con todo este tiempo para estar en mi taller y crear y dejar que fluyan mis emociones y poder mostrar mi arte.
-¿Con qué sueñas para tu arte?
-Es un sueño cumplido, es algo que sí o si quería hacer. El cementerio está lleno de sueños incumplidos y yo el mío quería materializarlo independiente de cómo lo hago. Mi sueño sería dedicarme a esto, que es lo que me mueve, lo que me llena de energía y lo que me gustaría hacer el resto de mis días.
Contacto: Instagram: @mismanosdepapel_