• La merluza y el congrio son los de menor aporte calórico, mientras que el salmón y el atún, los de mayor. Cuando se cocinen se deben lavar prolijamente, con abundante agua, y si se trozan o desconchan, hacerlo en una tabla exclusiva para estos alimentos.

Se acerca el viernes santo y la gente comienza a planificar un menú rico en pescados y mariscos. Sin embargo, hay puntos a tener en cuenta que no se deben olvidar, tales como su conservación y preparación y también algunos detalles de su aporte calórico y de colesterol.

Indiscutiblemente los pescados y mariscos frescos, como choritos, machas y almejas, tienen un valor calórico menor que las carnes rojas, por cada 100 grs, afirma la nutricionista de Megasalud, Nora Jara Isamit. “Los pescados magros, como merluza y congrio, son los de menor aporte calórico, siendo el salmón y el atún los de mayor; dentro de los crustáceos, los camarones -además de su carga calórica- son abundantes en colesterol”, especifica. Sobre los congelados, en su mayoría son de buena calidad; “son fáciles de preparar, vienen limpios, sin piel y conservan sus cualidades nutricionales”, dice.

Tips de manipulación y cocción

Al comprar mariscos, deben estar cerrados (el caso de los bivalvos: machas, choritos o almejas); en los pescados frescos, los ojos no deben estar opacos y su carne firme, además de tener  olor pertinente. “Pescados y mariscos deben refrigerarse en cuanto se compran y ubicarlos separados de frutas y verduras, ojalá en recipiente o bolsa hermética que no permita escape de fluidos”, aconseja.

La nutricionista dice que “cuando se cocinen se deben lavar prolijamente, con abundante agua y si se trozan o desconchan, hacerlo en una tabla exclusiva para estos alimentos  o simplemente, después de haberla usado lavarla con lavalozas y clorarla al menos 3 minutos; de lo contrario, se podrían contaminar verduras u otros alimentos (contaminación cruzada)”.

Recalca que “los pescados y mariscos deben consumirse cocidos (3 a 5 min. para destruir los microorganismos y  evitar que queden extremadamente duros), pues el limón no cuece las carnes ni destruye sus gérmenes, sólo produce un cambio aparente del color debido a la reacción del ácido del limón con el hierro (mineral) presente en la sangre de las carnes”.

Receta fácil

Una receta fácil, rápida y económica es el arroz con mariscos. Javier Rodríguez, food styler de De’Longhi Chile explica que la receta es muy simple:

  • Eche dos cucharadas de aceite y dos dientes de ajo en una olla o sartén.
  • Incorpore ½ pimentón rojo y ½ pimentón verde cortados en juliana.
  • Sofría por cuatro minutos.
  • Incorpore mariscos como choritos, machas y almejas, todos estos pueden ser conseguidos en lata y en cantidades de 200 o 250 grs (un poco más de una taza), siempre reservando los camarones, si es que se quieren añadir, para el último.
  • Agregue 300 grs (una taza y media) arroz con 2 tazas de caldo de pollo hirviendo y cocine por 10 minutos.
  • Vierta 2 tazas más de caldo con un poco de azafrán y cocine por 13 minutos.
  • Al final, añada 200 grs de camarones y cilantro a gusto si desea. Para terminar, deje mezclar por 2 minutos más, rectifique con sal y pimienta y sirva”, especifica.