Por Rebeca Ubilla M.
Se nos va el verano y marzo nos trae de vuelta a las rutinas laborales y de estudios de nuestros menores y jóvenes, lo que nos puede causar algo de angustia y ansiedad ¿Cómo tomarlo de buena manera?
El psicólogo del centro de salud mental de Clínica Santa María y miembro de y www.psicologosencasa.com, Juan Pablo Westphal nos recalca que: “tomar vacaciones es un cambio de actividad y como tal hay que planificar, no sólo lo que voy a hacer, sino que también la vuelta… para regresar tranquilos, no bajarse del bus, avión, auto e ir a trabajar, porque es agregar stress innecesario”.
“El estrés es algo que podemos manejar y que elegimos manejar, no necesariamente algo que nos tocó y hay que darse tiempos”, indica.
Hay que entender que se nos vienen unas semanas en que vamos a ir poco a poco cambiando hábitos, los horarios y “vamos a sentir el cuerpo medio atravesado, vamos andar medios trasnochados, con poca capacidad de retención de concentración y es algo normal”.
¿Qué hacer?
El especialista nos entrega algunos tips:
-Cualquier cambio debe ser paulatino. Por lo que si hemos alterado los horarios, las rutinas alimenticias, debemos ir poco a poco cambiándolos.
-Los niños y adolescentes deben comenzar a transformar sus horarios tres o dos días antes de su ingreso a clases, de lo contrario se puede generar ansiedad, estrés y la vuelta a clases se puede transformar en una situación de tensión que les puede generar rechazo.
-Tener en cuenta que el mundo de hoy es tecnologizado, es 24/7, conectado constantemente con una tecnología que no para, por lo tanto las personas tenemos que aprender a poner límites, a tratar de desconectar, cambiar de actividad y eso es una actitud personal que cada uno va construyendo: “yo soy el dueño de mis rutinas”.
-En la medida que elijo cosas que me hacen bien se va traduciendo en un buen ejercicio de salud mental y de autocuidado.
