Ideal para todos quienes buscan alimentación saludable a precios convenientes, Ki-Nua es un completo suplemento instantáneo en polvo creado por un matrimonio de emprendedores y profesionales de la salud de Osorno cuando andaban en busca de una opción nutritiva para su hija, alérgica a la proteína de la leche de vaca. Así llegaron a la quínoa, la “mejor proteína vegetal del mundo”, como la definen.

La quínoa es el súper alimento estrella que da vida a Ki-Nua, el nuevo suplemento instantáneo en polvo disponible en el mercado, gracias al trabajo del matrimonio compuesto por Daniela Winkler (kinesióloga) y Felipe Ríos (médico cirujano), dos profesionales de la salud de Osorno.

Elaborado 100% con quínoa chilena, sin gluten, azúcar, sodio añadido, colorantes, preservantes, ni trazas de alimentos alergénicos, Ki-Nua es ideal para todas las personas que no consumen proteína animal, por opción o por necesidad, como veganos y vegetarianos; a los alérgicos a la proteína de leche de vaca, o quienes sufren enfermedades con mala absorción.

Pero el objetivo de esta pareja de emprendedores va más allá y apunta a todos los que buscan alternativas para una alimentación más saludable, desde bebés hasta adultos mayores e incluso deportistas. “Aún no se asume que comer mal no sólo engorda (que es lo que le preocupa a la mayoría), sino que nos enferma. Por algo somos el país que más consume bebidas azucaradas”, advierte Daniela, destacando la necesidad de abrir la oferta de productos que ayudan a mantener la buena salud de la población.

El suplemento alimenticio fue presentado en sociedad este miércoles 31 de agosto en el Restaurante Quínoa, que hace honor al nombre de su poderosa materia prima. Para su producción, Ki-Nua se nutre de la quínoa autóctona de Chile, proveniente de la costa de la Región de O’Higgins, además de la que producen pequeñas comunidades de Purranque y Fresia, potenciando así la agricultura familiar campesina.

“UN PSEUDOCEREAL MARAVILLOSO”

Ki-Nua surgió por un tema estrictamente familiar, debido que la hija del matrimonio de emprendedores es alérgica a la proteína de la leche de vaca. “Nos enfrentamos al desafío de qué darle en vez de leche, en la ciudad de la leche y la carne”, cuentan.

Primero querían probar con una bebida en base a arroz, hasta que conocieron a su “mentor”, Hernán Pacheco, quien les mostró los beneficios de la quínoa y se embarcaron en este saludable proyecto. “La quínoa es un pseudocereal maravilloso, la mejor proteína vegetal del mundo, tiene todos los aminoácidos esenciales, calcio, los ácidos grados omega 3 y 6, vitamina B, fibra vegetal, una buena cantidad de calorías y no contiene colesterol”, describe Felipe Ríos.

Durante su elaboración, Ki-Nua atraviesa un riguroso proceso que mantiene las cualidades naturales de las materias primas utilizadas. Otro plus es la formación de los emprendedores. “Que sean dos profesionales de la salud detrás de la creación de los alimentos es un plus y esto le ha dado fuerza a Ki-Nua, pensando en el beneficio que tiene en la persona. Por ejemplo, un médico que es súper estricto con la alimentación de su hija nos decía que le daba confianza el producto, ya que nació como respuesta a una necesidad real y no por una motivación meramente comercial”, comenta Daniela.

SABOR Y PRECIO

Ki-Nua se puede consumir al desayuno, al almuerzo o en otras comidas, como ya lo hace el matrimonio Ríos-Winkler. “Nuestra hija Catalina ya tiene 3 años, toma Ki-Nua en la mañana acompañado de leche vegetal, y además en la colación que lleva al jardín infantil. También comemos la quínoa en polvo en batidos de fruta o se lo agregamos a las ensaladas, lo cual es súper potente porque añade la proteína a los vegetales”, cuenta Daniela.

En relación a la competencia (un producto importado de Colombia),  Ki-Nua es 20% más barato, y además está hecho con quínoa chilena, que tiene mayores propiedades nutricionales. También cuentan con una versión con berries nacionales, el Ki-Nua & Maqui, que aporta más de 2/3 de los antioxidantes del día, y otra acompañada de murta.

El producto viene a romper la idea de que estos alimentos sólo son para los paladares gourmet y para las personas con alto poder adquisitivo. De hecho, tiene un precio que va entre $9.500 y $10.900 (valor sugerido para la venta en tiendas de especialidad) en el caso del envase de 400 gramos.  También hay una versión en caja con 7 sachets individuales cuyo valor es bajo los 8 mil pesos, cuya principal ventaja es que puede ser llevado donde quiera, para acompañarlo con el producto de su preferencia y a la hora que guste.

El producto fue desarrollado como parte de la iniciativa “Jóvenes innovadores” de la  Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Ministerio de Agricultura junto a la Embajada del Reino Unido a través del Fondo Newton-Picarte e InnovateUK, para proyectos de alto impacto en el sector agrario, agroalimentario y forestal del país. Además, Ki-Nua es apoyado por el Programa Regional de Apoyo al Emprendimiento, Región de Los Lagos de Corfo.

Como parte del fondo de FIA, Daniela y Felipe participaron en diciembre en una gira técnica de alto nivel a Inglaterra donde tuvieron visitas a las universidades Cambridge y Oxford y reuniones con empresas. “Nos abrió la cabeza para profundizar el plan de negocios y definir bien el producto”, destaca el matrimonio. Gracias a esa visita, trajeron contactos para llevar Ki-Nua al mercado británico, y también tienen planes de llegar a Australia y México.

Ki-Nua podrá ser encontrado en tiendas de especialidad, y de productos naturistas, además de venta directa a agrupaciones de alérgicos o celíacos. Ya están en locales de Osorno, Puerto Varas y Santiago, y la idea es expandirse al resto de las regiones. También puede comprarse en internet en www.tucajita.cl o en www.ki-nua.com.