El embarazo es uno de los procesos más importantes para la vida de una mujer.

Desde niñas soñamos con ser mamás y con nuestra guatita. ¿Te imaginas poder guardar esa guatita como recuerdo? Pinta tu panza a tu pinta lo hace posible. Es un innovador servicio pensado para  mujeres  embarazadas y desarrollado únicamente en Chile por Macarena de la Parra. Este proyecto, es el resultado de  un estudio sobre los importantes cambios en la mente y en el cuerpo femenino. Este objeto artístico cobra tanto valor para cada mamá y su hijo ya que juega con el recuerdo, con lo importante que fue para la mujer su embarazo, su panza, su cuerpo, y con lo increíble que va a ser para el bebé después ver donde creció esos 9 meses.

¿Cómo nació la idea de crear este emprendimiento?

“Una amiga se hizo con su marido el molde de su panza embarazada y después no sabía qué hacer con ella. Para ellos era un pedazo de yeso bastante inútil. Yo la vi y al tiro me dieron ganas de pintarla, para mí era como un lienzo listo para ser pintado. Entonces lo hice y enseguida se corrió la voz y ahí nació la pyme Pinta tu panza a tu pinta”.

La iniciativa consiste en modelar con yeso la silueta de una mujer embarazada, para que posteriormente el molde de yeso que se forma sea intervenido artísticamente con distintas técnicas según lo que le madre y el padre decidan.

ETAPAS DE TRABAJO

La primera consiste en modelar con yeso la silueta de una mujer embarazada que ya evidencie crecimiento en su vientre. Es decir, desde las 30 semanas en adelante. Se hace con vendas de yeso que no demoran en secar más de 20 minuto. En la segunda etapa, se crea  una escultura pintada que representa de forma artística el poder del embarazo.

Los materiales que se utilizan son variados, para realizar molde se usan vendas de yeso y vaselina para proteger la guatita y en la decoración se utilizan los acrílicos, pero también con tinta china, pasteles, acuarela, carboncillo, y a veces se hacen  con telas, o con lanas, o con decopage, o con papel maché.

Hacer el molde de yeso captura “el momento”, ese gran momento que dura 9 meses y que luego desaparece. El valor que tiene es que es un recuerdo único e invaluable. La madre y el bebé se unen en el objeto para siempre.

“Este proceso tiene una duración de 30 y 40 minutos, pero  el diseño se pide con más anticipación, como unas tres semanas”, señala la Macarena de la Parra

No tiene contraindicaciones para el bebé, ya que antes de comenzar a hacerlo, se aplica una  capa gruesa de vaselina líquida sobre la piel de la mamá.

Los diseños de las guatitas son variados, pueden ser propios o las madres mandan a hacer uno en especial. Es un momento de conexión entre la madre y el bebe, ya que es una manera de acercamiento antes de que nazca.

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