Un estudio realizado por Criteria, RedMad y Coca-Cola Chile identificó que el estrés laboral, así como la carga de trabajos domésticos y de cuidados son factores que inciden en la posibilidad de cumplir metas que demandan tiempo y dedicación, como desarrollar un pasatiempo, capacitarse o cultivar relaciones con amigos.

El estudio identifica que, a igual nivel de estrés laboral, dado que las mujeres tienen más carga de trabajo doméstico que los hombres, viven un nivel de satisfacción menor que los hombres en cuanto al cumplimiento de sus metas de desarrollo personal.

Terminó el 2022 y es tiempo de planificarse para este nuevo año. Comienzan los balances laborales y personales, donde evaluamos cuánto pudimos cumplir con lo que nos propusimos a inicios de año y cuáles son los temas que tenemos aún pendientes.

Para conocer el impacto de las exigencias del mundo laboral y familiar en la realización personal, Criteria junto a la Red de Mujeres en Alta Dirección (REDMAD) y Coca-Cola Chile realizaron un estudio entre cerca de mil personas mayores de 18 años, a nivel nacional, en la que preguntaron sobre las metas propuestas para 2022 y el nivel de satisfacción con el logro de ellas.

Los resultados generales demostraron que las personas que se encuentran estresadas laboralmente tienen un porcentaje significativamente mayor de frustración con el cumplimiento de las actividades propuestas de desarrollo personal, especialmente en las mujeres con un 38% versus el 30% los hombres.

Esto puede explicarse por el hecho de que, en el caso de las personas estresadas laboralmente, las mujeres tienen además una carga de trabajo doméstico mayor que los hombres: 42% de ellas realizan al menos cuatro actividades por tres horas o más a la semana, mientras que en el caso de los hombres la cifra llega a un 24%.

“Vemos que, en el desarrollo de carrera de las mujeres, la conciliación trabajo y vida personal es uno de los mayores desafíos y a la vez una barrera nítida para su avance a la alta dirección. Este tipo de estudios nos permiten comprender mejor los desafíos y la importancia de considerar las variables que aportan bienestar a las personas, que van más allá de las tareas domésticas o del trabajo”, señala Maribel Vidal, vicepresidenta de REDMAD.

Al momento de desglosar las propuestas de desarrollo personal para este año, un 80% asegura que buscó tener hábitos más saludables (hacer deporte, mejorar la alimentación, dejar de fumar, entre otros). Sin embargo, un 27% se declara frustrado con este propósito, siendo más alto en las mujeres con un 32%.

Por otro lado, un 79% se mostró proclive a cultivar más las relaciones personales (familiares, hijos, amigos, pareja), con un 9% de frustración general, siendo también más alto en las mujeres con un 10%. Asimismo, un 70% se puso como objetivo capacitarse (tomar cursos, ampliar conocimientos), pero un 20% advierte que no lo cumplió, también siendo más alto en las mujeres con un 22%.

“Uno de nuestros pilares fundamentales como compañía es impulsar el empoderamiento económico femenino, especialmente en mujeres emprendedoras y jóvenes. Nuestras iniciativas para atender este compromiso, tanto para dueñas de almacenes como para la empleabilidad juvenil, buscan entregarles herramientas a través de capacitaciones en áreas técnicas y también con un fuerte componente en habilidades blandas, como empatía, empoderamiento, autonomía y confianza. Este estudio nos permite seguir enfocando nuestros esfuerzos para potenciar los liderazgos femeninos.”, explica Paola Calorio, directora de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sustentabilidad de Coca-Cola Chile, Bolivia y Paraguay.

Finalmente, un 61% piensa que era importante desarrollar un pasatiempo (tocar un instrumento o leer libros), frente un 19% que se mostró insatisfecho con esta propuesta; mientras que un 27% se propuso participar en organizaciones sociales (voluntariado o fundaciones) pero un 29% cuenta que no pudo lograrlo, siendo la cifra más alta de insatisfacción en mujeres con un 34%.

Camila Sepúlveda, Directora de proyectos de Criteria destaca que “el hecho de que las mujeres muestren un mayor nivel de insatisfacción con la realización de actividades de desarrollo personal parece no explicarse por la carga laboral, sino que por la carga de trabajo en el ámbito doméstico y familiar (cocinar, limpiar, lavar la ropa, planchar, alimentar a los niños, ayudarlos con las tareas e ir a actividades de apoderados). Los costos de una distribución desigual de las actividades del hogar lo pagan finalmente las posibilidades de las mujeres de hacer más deporte, juntarse más con amigos, leer más, tomar más cursos, etc.”

Trabajo doméstico y estrés laboral


El sondeo también indagó sobre la carga del trabajo doméstico, donde nuevamente las mujeres destacan con un 28% por realizar al menos cuatro actividades por 3 horas o más en la semana, versus un 18% de los hombres. 

Respecto del estrés laboral, un 45% de los encuestados asegura que trabaja hasta tarde los días de semana, con una leve ventaja de parte de las mujeres (47%) versus los hombres (43%). Si consideramos estas situaciones de estrés laboral, un 16% de los consultados advierte que debe lidiar con al menos dos de los problemas antes mencionados.