Sergio Chamy, el entrañable protagonista de la película, caminó ayer por la alfombra roja junto a la directora Maite Alberdi y la productora Marcela Santibáñez.
La 93ª edición de los premios Oscar, que tuvo lugar anoche en la estación de tren Union Station de Los Ángeles, sede que funcionó paralelamente al Dolby Theatre de Los Angeles, dejó postales imborrables como la del querido Sergio Chamy caminando por la alfombra roja junto a Maite Alberdi y Marcela Santibáñez, directora y productora de “El Agente Topo”, respectivamente. En su primer viaje en avión fuera del país, el protagonista del filme pudo compartir las cámaras y la atención con celebridades de Hollywood.
Aunque el filme chileno, que ha sido aplaudido y premiado en festivales como los de Sundance y San Sebastián, no logró llevarse la estatuilla a Mejor Documental, concretó un logro histórico para el país. Alberdi es la primera mujer chilena en ser nominada en los Premios de la Academia y es primera vez que una producción nacional llega a la categoría de cine de no-ficción. La importancia de esta nominación abre un precedente para el futuro, tomando en cuenta la prolífica producción de documentales de calidad que se realizan cada año.
Todo el equipo estaba muy contento por formar parte de la fiesta del cine más importante del mundo y por haber tenido la primera nominación histórica de Chile a Mejor Documental. Esto no es solamente producto natural de la elogiada carrera de Maite Alberdi, quien cautivó al mundo con su película “La Once”, sino que un reconocimiento al trabajo de un equipo compuesto principalmente por mujeres. Además de Alberdi y Santibáñez, en “El Agente Topo” participaron Carolina Siraqyan (montaje) y Catalina Devia (dirección de arte), entre otras profesionales del audiovisual.
“Una ola gigante nos levanta en la alfombra roja de hoy. Esa ola la empujan las directoras latinas, los adultos mayores, todos los personajes de otras películas que nos han regalado maravillosas historias, un equipo talentoso que apostó en construir sueños lejanos, los cineastas y colegas chilenos que han abierto puertas y ventanas y que nos alientan con emoción. Un país que, aunque está en momentos dolorosos nos dio la oportunidad de ser algo de luz y que nos ha cubierto de cariño a la distancia. ¡Qué ola gigante de amor que hizo posible este camino! La sentimos levantarnos, la llevamos con nosotras siempre”, indicó Maite Alberdi en la red social.
El equipo tuvo la oportunidad de conocer diversas personalidades y una de las anécdotas ocurrió durante la fiesta de celebración al compartir con el equipo ganador en su categoría. La co directora, Pippa Ehrlich, ofreció simbólicamente compartir su premio con el equipo como un gesto de cariño al desempeño de Don Sergio en la película.
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