El programa Vivo Curimón de Fundación Lepe está realizando diversas actividades con  establecimientos educacionales de la zona, en el marco del proyecto “La Ruta de San Francisco”, que busca recuperar la memoria colectiva asociada a la Fiesta que se celebra cada 3 y 4 de octubre en esta localidad.

El objetivo de estas iniciativas es vincular a los niños, niñas y jóvenes de Curimón con temáticas en torno a la ecología y al patrimonio natural, conectándolos con la tierra. Las actividades han sido pensadas para revivir el espíritu franciscano y su profunda vinculación con el medio ambiente.

Un ejemplo de esto es la creación de jardines de plantas medicinales en el Jardín Infantil Conejitos Saltarines, en la Escuela Carmela Carvajal y en el Colegio Curimón, además de la generación de talleres para traspasar conocimientos acerca de sus usos y propiedades a los alumnos y a los educadores y docentes. “La idea es generar acercamientos profundos a través de experiencias educativas dinámicas. Cada jardín que hemos co creado con las comunidades educativas es diferente: uno en forma de laberinto, otro de espiral y otro acompañado de un hermoso mural de flora y fauna nativa” explica Flavia Moraga, encargada de la vinculación con los establecimientos educacionales de Vivo Curimón.

Pintando Mural Esuela Carmela Carvajal (1)

A esto se le sumarán talleres de faroles ecológicos realizados con material reutilizado y de máscaras inspiradas en la fauna nativa, lo que tienen como objetivo incentivar la participación de las niñas y niños en la Fiesta de San Francisco. En la noche anterior al 4 de octubre, la comunidad sube al Santuario, ubicado en el Cerro San Francisco, con los faroles, para acompañar simbolicamente al santo en su tránsito hacia la muerte.

“Concientizar a las nuevas generaciones sobre este patrimonio inmaterial tan ligado a la historia local es esencial para que esta festividad se mantenga en el tiempo” explica Javiera Ide, Coordinadora proyecto Vivo Curimón.

Cabe destacar que todas las actividades se han desarrollado con la colaboración de las comunidades educativas, de la Fundación Aldea y del artista curimonino Humberto González, quien se ha encargado de diseñar especialmente para esta ocasión los faroles, máscaras y murales.