“Cada vez más despierta el interés en las familias de tener sus propios cultivos, de manera de facilitar el contacto de los niños con los ciclos de la naturaleza, la lógica del campo y la tierra”, cuenta Roberto Mayerson, dueño de Bebé Urbano.

Insertos en una época donde la tecnología es parte de la rutina diaria, hay padres que buscan mostrar a sus hijos actividades diferentes, de forma de sacarlos del sedentarismo y alejarlos de las pantallas. Crear conciencia en los niños sobre la importancia de cuidar el medio ambiente, sembrar y crear vida son temas que importan hoy en día.

Para potenciar sus habilidades de concentración, paciencia y responsabilidad, la tienda infantil Bebé Urbano -www.bebeurbano.cl- acaba de incorporar a su catálogo “Mi Primer Huerto”, un kit especialmente diseñado para niños que les permitirá plantar su propio huerto de una forma distinta y colorida.

Las actividades relacionadas con la jardinería o el cultivo de una huerta ayudan a potenciar la concentración y la capacidad de observación en los niños. “Cada vez más vemos el interés de las familias de tener sus propias huertas de manera de facilitar el contacto de los niños con los ciclos de la naturaleza, la lógica del campo y la tierra”, cuenta Roberto Mayerson, dueño de Bebé Urbano.

El pack Mi Primer Huerto cuenta con bombas de semillas de: cilantro, tomate, perejil, zapallo italiano y lechuga, hechas con un sistema de encapsulado de arcilla (Nendo Dango) usadas para plantar, sin necesidad de enterrarlas. Su alto nivel de nutrientes y sus componentes naturales, permiten una mejor germinación en su etapa inicial. Al entrar en contacto con el agua del riego o lluvia, se activa el proceso de germinación aumentando su posibilidad de brotar en un mil por ciento.

Para lograr el brote, los niños deberán cuidarlas tal como lo harían con cualquier planta. Regarlas y asegurarse que reciban al menos 4 horas de sol al día, al paso de los días, los pequeños verán brotar de su cascarón y luego el alimento que hayan cultivado.

Otro aspecto muy interesante de “Mi primer huerto”, es que gran parte de su producción está hecha por manos de jóvenes con discapacidad intelectual, aportando así a su integración laboral.

La jardinería en los niños, señala Mayerson, “potencia sus habilidades intelectuales y físicas, ya que al mirar cómo crecen cada semana sus cultivos, están practicando sin darse cuenta la observación y la concentración. Además, una huerta es un espacio que facilita que el niño se centre en una actividad concreta y tenga paciencia”.

Valor del kit:  $ 10.990 y trae 5 bombas diferentes de semillas.

Dónde? www.bebeurbano.cl

Gerónimo de Alderete 1546, Vitacura.