Se acerca una nueva navidad y si bien es una fecha de encuentro y reflexión, hay algunos que se introducen en la vorágine de las compras incluso de forma compulsiva endeudándose y causando más daño que alegría.
Paulina Pérez, psicóloga de Vidaintegra indica que “las personas que tienen esta tendencia que conocemos como compras compulsivas, siempre están pensando en que comprar, y cuando lo hacen, es de una forma que no pueden controlar. Adquieren muchas más cosas de las que son capaces de pagar y por ende se endeudan. Sin embargo, el sentimiento que les provoca es de satisfacción y por ello, no mucho tiempo después, vuelven a comprar para experimentar esa sensación nuevamente”.
Añade que “es una especie de manía y/o adicción porque van teniendo el refuerzo inmediato y positivo de lo que provoca adquirir algo. Entonces, como tienen este refuerzo positivo constante las personas quieren volver a sentirlo comprando una y otra vez”.
Así, la especialista advierte que “la Navidad, por ende, puede ser usada como pretexto para comprar compulsivamente, porque no solo compran para sí mismos sino también para los demás. Si un comprador compulsivo ya lo es durante el año, se acentúa en esta época festiva”.
Recomendación
Respecto a los trastornos que pueden relacionarse a este tipo de conducta, Paulina Pérez indica que ellos se vinculan con los trastornos depresivos o bipolar.” En este último caso, cuando se encuentran en una fase maniaca, puede haber mucha compra compulsiva. Se habla también de aspectos ansiosos o depresivos porque la compra va aliviando, en cierto sentido, aquellas cargas emocionales más destructivas”.
Ante la situación señalada, la especialista comenta que “para hacer compras de forma más tranquila para quienes tienen este tipo de conductas lo ideal es definir un presupuesto, de esta manera la persona puede controlar el gasto. Ya que, si se usa la tarjeta de crédito sin definir límites, por ejemplo, el comprador no se percatará de cuanto está gastando y se endeudará, lo que en el futuro podría traducirse en un factor más de estrés”.