Por Consuelo Zerené
Actriz y Mentora en Comunicación Efectiva
Muchas mujeres hemos sentido miedo a hablar en público. Recuerdo perfecto cuando tenía 15 años y con mucha ilusión entré al taller de teatro. El primer día, el profesor me pasó un poema de Gabriela Mistral, para que lo leyera frente a mis compañeros. Mientras leía me temblaban las rodillas, me transpiraban las manos y sentía que me iba a poner a llorar de miedo. Pero es algo que se puede trabajar, de hecho, ese año, terminé rapeando el poema de la Mistral frente a todo el colegio. Y paradójicamente, ahora me dedico a exponerme. En mi trabajo como actriz y como mentora en Comunicación Efectiva.
Así que si es que tienes una marca personal y sabes que debes mostrarte para llegar a más personas, pero te da miedo el solo hecho de pensar en exponerte… sigue leyendo, porque te compartiré tres consejos para que comiences a hacerlo.
1. Muchas alumnas me dicen que les da vergüenza grabarse, porque sienten que se ven gordas, porque se sienten feas ante la cámara, porque no les gusta su pelo, etc. Lamentablemente, el 84% de las mujeres declara sentirse disconforme con su apariencia física (Fuente: La Tercera) y cuando una se ve en un video verá todo eso que no le gusta. Pero, si lo piensas objetivamente, para todo el resto de las personas, eres tú, la de siempre, solo que en formato video. Además, seamos honestas, si esperas lograr el inalcanzable prototipo de belleza del momento, cumplirás los 100 años esperando poder mostrarte en redes sociales.
2. Si tienes una marca personal, mostrarte es parte de tu trabajo. Y si el contenido que entregas le mejora la calidad de vida a las personas, es tu deber compartirlo. Si no pareces modelo, si no tienes el mejor equipo de grabación, si no sabes editar, da lo mismo. Son sólo excusas. Tú ocúpate simplemente de entregar ese valioso mensaje que tienes para compartir.
3. Esto es algo super sencillo, pero que te va a ayudar a mejorar cualquier video que quieras hacer. Cuando te grabes procura siempre tener una luz frente a tu rostro. Si no tienes un aro led, que a todo esto es una super buena inversión, puedes poner una lámpara o puedes grabarte frente a una ventana. Pero en serio anda ahora a comparar la diferencia de grabarte con la luz de frente y a contraluz, para que veas de qué estoy hablando.
Te invito a poner en práctica estos consejos. Puedes comenzar de a poquito, pero comienza. Recuerda que todas fuimos principiantes alguna vez. Esa típica frase de “lo haré cuando me sienta segura” ¡es mentira! De hecho funciona al revés: mientras más lo hagas, más segura te sentirás. Así que la invitación es a comenzar HOY.
Si necesitas más tips sobre cómo hablar en público y en cámara a pesar de la vergüenza, anda a revisar los recursos gratuitos que tengo en mi cuenta de instagram @consu.comunica. Te espero ahí.
