• Índice Anual de TMF Group clasifica a 95 países de acuerdo a sus sistemas regulatorios y de cumplimiento.
  • Chile nombrado como el país 37º más complejo para hacer negocios en lo que respecta a la regulación y el cumplimiento, mejorando del puesto 19 en 2014; con desarrollos en la transparencia y la digitalización.
  • Cinco países latinoamericanos clasificaron entre las primeras 10 posiciones, haciendo que la región sea la más compleja para hacer negocios desde una perspectiva normativa y de cumplimiento, seguida de Asia.

Chile ha sido nombrada como una de las naciones menos complejas en América del Sur para las compañías multinacionales mantenerse en cumplimiento con la normativa y la legislación corporativa, según el Índice Global de Complejidad 2015 de TMF Group, principalmente debido a los esfuerzos destinados a la reorganización de los procesos regulatorios y la promoción de la transparencia.

Este estudio anual realizado por TMF Group, un proveedor global líder de servicios de negocio de alto valor a clientes que operan e invierten a nivel internacional, ha clasificado 95 jurisdicciones en toda Europa, Oriente Medio, África, Asia-Pacífico y las Américas, de acuerdo a cuán complejo son para hacer negocios desde una perspectiva regulatoria y de cumplimiento. El informe completo se puede ver en [este enlace]

Cristian de la Cerda, Director General para TMF Group en Chile, explica: “Chile ha estado fortaleciendo y manteniendo sus esfuerzos para ser un país atractivo para la inversión. Se han producido avances significativos en la conectividad digital, así como para ofrecer un marco legal más transparente y anti-discriminatorio. Para mejorar aún más la competitividad, Chile también ha alcanzado nuevos acuerdos comerciales regionales y multilaterales”.

Promover la simplificación de negocios se ha vuelto cada vez más una tarea crítica para Chile y sus socios en la región, ya que la caída de los precios del cobre y otras materias primas aumenta la necesidad de inversión extranjera directa.

América Latina, sin embargo, se queda rezagado del resto del mundo cuando se trata de reducir la complejidad regulatoria. Argentina es la jurisdicción más compleja del mundo para la regulación y el cumplimiento, según el índice de TMF Group, seguido de cerca por Colombia (3º) México (6º) Bolivia (7º) y Brasil (10º). Las empresas multinacionales que operan en la mayoría de estos mercados tienen que hacer grandes inversiones en tiempo y mano de obra con el fin de navegar lo que es a menudo un entorno regulador denso y mal definido.

Chile, por su parte, se ha movido hacia prácticas de negocio más amigables. El país es también uno de los más avanzados de América Latina en el control de la corrupción, que es esencial en la creación de un campo de juego de nivel corporativo.

“El marco fiscal en Chile es competitivo y altamente automatizado, además, los procesos de negocio son claros y bien conocidos. Por ejemplo, el establecimiento de una nueva empresa (PYMES, en particular) podría completarse en un solo día. Aun así, el conocimiento de las leyes, reglamentos, requisitos y procesos locales es vital para las empresas que buscan operar en Chile”, añadió de la Cerda.

Otros países vecinos de América Latina que han obtenido mejores resultados en la clasificación incluyen Uruguay (55ª), Ecuador (40ª), Chile (37º) y Paraguay (29º). La siguiente región más compleja en términos de cumplimiento es Asia, con tres países en las primeras 10 posiciones, entre ellos Indonesia (2º), China (5º) y Tailandia (9º).

Según los expertos de TMF Group, muchas de las jurisdicciones más complejas comparten ciertas características no vinculadas a una región específica. Con la excepción de China y los Emiratos Árabes Unidos (cuarto en el índice), todas las jurisdicciones en las primeras diez posiciones tienen un sistema jurídico basado en el derecho civil y no en el común. En términos generales, el desarrollo de estos sistemas ha sido plagado por inversión limitada y la falta de infraestructura jurídica necesaria para apoyar un ambiente corporativo sólido.

En el otro extremo del índice, Irlanda (95) ha sido clasificada como el lugar menos complejo para hacer negocios, en gran parte debido a su marco de derecho común, ambiente político estable, fuerte marco regulatorio y actitud pro-empresarial.