Fortalecimiento del sistema inmune, mejora en el estado de ánimo, menor riesgo de metástasis y mejor tolerancia a los tratamientos oncológicos son algunos de los beneficios de practicar actividad física de manera regular. Eduardo Méndez, médico deportólogo de Bupa Sport, parte de IntegraMédica, nos cuenta más.

  Dentro de las investigaciones realizadas en el mundo de las ciencias del ejercicio, se ha demostrado que el cáncer de mama es una de las patologías oncológicas con mejor respuesta a la realización de actividad física regular, tanto en materia de prevención como del tratamiento de la enfermedad. Eduardo Méndez, médico deportólogo de Bupa Sport, nos explica los beneficios.

“El cáncer de mama resulta ser uno de los tipos de cánceres que puede ser altamente prevenido mediante la práctica de ejercicio físico regular, entendiendo esto como la realización de al menos 150 minutos de actividad física de intensidad moderada a la semana. Asimismo, se ha demostrado que el ejercicio en personas diagnosticadas puede aumentar la expectativa de vida en un 40%. Así, sentarse menos y moverse más, es definitivamente un remedio bueno, bonito y barato cuando pensamos en cómo prevenir y tratar esta enfermedad”, asegura el especialista en medicina deportiva.

Entre los principales beneficios, destaca el fortalecimiento del sistema inmune; una disminución muy importante en el riesgo de metástasis; una mejor tolerancia a los tratamientos que habitualmente son utilizados en pacientes diagnosticadas con cáncer de mama; y una menor tasa de depresión y trastornos del ánimo.

Respecto a qué tipo de ejercicio hacer, el doctor Méndez sostiene que no existe alguno más recomendable que otro, sino más bien el que más motive y entusiasme a la persona, de manera que se sienta animada a seguir practicándolo a lo largo del tiempo.

“Sin embargo, siempre es bueno incluir tanto ejercicios cardiorrespiratorios, como caminar, andar en bicicleta o trotar, con ejercicios de fuerza. Estos últimos muchas veces son visto de lejos por las mujeres, pensando que las harán verse más masculinas, cuando en realidad eso no ocurre y su práctica al menos dos veces a la semana no solo se relaciona con disminución de muchas enfermedades, sino que con un mejor control del tejido graso y una adultez más saludable e independiente”, sostiene el especialista.

Así, el médico deportólogo, enfatiza la importancia de mantenerse en movimiento, ya que cada paso cuenta. “La actividad física es una medicina que todos tenemos a mano, lo importante es atreverse y buscar la forma de practicarla. En Bupa Sport tenemos un completo equipo de profesionales del área del ejercicio que puede orientar y ayudar a personas con diferentes enfermedades a encontrar un camino para ir logrando sus objetivos en forma segura y con herramientas adecuadas”, añade el doctor. Méndez.