En las próximas semanas, Finlandia dejará de enseñar la letra manuscrita o ligada para privilegiar la imprenta y la escritura en teclado. Tratándose de un sistema educativo ejemplar, no es de extrañar que la discusión sobre esta medida haya llegado a las aulas de todo el mundo, y expertos dicen que podría no ser la mejor decisión.
A partir de agosto, Finlandia dirá adiós a la letra manuscrita cursiva en los colegios para reemplazarla por la letra imprenta. Se podría creer que la caligrafía es algo irrelevante al momento de crear habilidades en los estudiantes. Sin embargo, los expertos señalan lo contrario.
Además de los datos que ya se conocen, que apuntan a que escribir a mano es clave para que los niños desplieguen adecuadamente la capacidad de procesar la información que reciben, la profesora de psicología educativa de la Universidad de Washington, Virginia Berninger, comentó al periódico The New York Times que a comienzos del cuarto año de educación básica, las habilidades de la letra cursiva otorgan ventajas tanto en la ortografía como en la redacción. Esto se debería a que unir trazos ayuda a que los niños también unan las letras para formar palabras.
Por su parte, en Alemania, la Federación de Profesores ha manifestado su rechazo a la idea de dejar de lado la letra cursiva y reemplazarla por la imprenta. Según señaló el representante del grupo al medio germano Deutsche Welle, la cursiva fue creada para escribir más fluidamente con la mano, mientras que la letra de imprenta escrita dificulta este proceso porque el lápiz se tiene que levantar del papel y se pierde rapidez al escribir cada letra, lo que perjudica algunas tareas, como tomar apuntes.
En este caso, los materiales que utilizan los estudiantes para escribir juegan un rol primordial, ya que un lápiz cómodo y que se desliza fácilmente sobre el papel facilita la expresión escrita. Así, una forma ergonómica y puntos antideslizantes en la estructura del lápiz generan un mayor control al momento de escribir. “La forma del lápiz es muy importante en cómo el niño trabaja, ya que facilita sus tareas e incentiva su creatividad”, comenta Juan Pablo Hurtado, gerente general de Faber-Castell Chile, quien sostiene que, tanto para los niños que aprenden a escribir como para los adultos que retoman esta práctica, utilizar lápices adecuados ayudará a evitar el cansancio de la mano y generar una experiencia de escritura más agradable.
Cabe destacar que Finlandia, país cuyo sistema educativo es reconocido como el mejor del mundo, decidió eliminar la obligatoriedad de la caligrafía tradicional, pero mantendrá la escritura manual con letra de imprenta y potenciará el uso del teclado.
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