Alrededor de 300 millones de habitantes en el mundo sufre de asma, un trastorno inflamatorio de las vías respiratorias que, en algunos casos, puede llevar a una persona a la muerte.

Dificultad para respirar, presión en el pecho, tos con o sin producción de esputo (flema) y retracción de la piel entre las costillas al respirar, son sólo algunos de los síntomas que abarca esta enfermedad, la que se presenta por periodos que pueden durar minutos o incluso varios días.

“Las causas del asma  pueden ser extrínsecas tales como alérgicas al polen, pastos, malezas, dermatofagoides; alergias a productos ocupados en el trabajo, como la exposición a harina de trigo y plásticos. También existen factores intrínsecos, en la cual no se logra demostrar la causa aparente”, explica el broncopulmonar de la Clínica Vespucio, Javier Cerda.

Muchas de las personas que padecen esta enfermedad, sin  saberlo, tienen antecedentes familiares de alergias, tales como la rinitis crónica o eczema, es por eso que la principal recomendación es tratar de manera temprana posibles casos de asma. “No hay límite de edad para ser diagnosticado, puede ser en la infancia, adolescencia, juventud, adulto e incluso, adulto mayor”, aclara el especialista.

El humo de tabaco, el estrés, la actividad física e incluso medicamentos comunes como la aspirina u otros inflamatorios, también pueden ser desencadenantes del asma, que, sumados a la mala calidad del aire y los fríos intensos de estos meses, pueden provocar una crisis asmática en los pacientes que la padecen.

El uso de medicamentos que dilatan las vías respiratorias (broncodilatadores), ayudan a sobrellevar este enfermedad, sin embargo inhalar aire frío, hacer ejercicio con malas condiciones de aire o incluso la acidez gástrica (reflujo) pueden hacer que el asma empeore drásticamente.

Es por eso que junto a su médico, se debe desarrollar un plan que elimine todos estos desencadenantes del asma. Además, debe tratarlos con medicamentos que ayuden no sólo a prevenir los ataques, sino también a tratarlos durante una crisis de este trastorno. Siempre es muy importante que no se auto medique, consulte a su médico.