Le llaman el “tesoro biológico” del siglo XXI. Aseguran que con ellas podrán “conservar” la salud de sus hijos para el futuro porque curan decenas de enfermedades. Y hasta garantizan rápidos efectos en adultos. Pero ¿qué de esto es cierto? Te ayudamos a descubrirlo.

Basta un poco de sangre del cordón umbilical o una muestra de tejido del cordón umbilical, médula ósea, grasa y hasta dientes – que luego se criopreservan- para que una persona asegure tratamientos que le permitirán superar enfermedades como leucemia, artrosis, necrosis vascular de cadera y hasta un órgano que pudiera desarrollar en el futuro, en un mundo que sufre de déficit crónico de donantes.

Actualmente, existe un sinnúmero de bancos de células madres en nuestro país que ofrecen la extracción y posterior congelación de esta célula. Sin embargo, este procedimiento no es suficiente para asegurar un tratamiento para alguna enfermedad.

BFL, es el único banco en Latinoamérica que aparte de extraer las células las expande a miles de ejemplares que permiten asegurar el número necesario de células para el tratamiento de alguna enfermedad.

Según afirma Rodrigo Mardones, Director de BFL, “gracias al proceso de expansión, hasta ahora se han beneficiado más de 200 pacientes que han tenido exitosos resultados en el tratamiento de diversas enfermedades. Ellos han sido tratados mediante el uso de sus células madre extraídas de su médula ósea, pulpa de diente o tejido adiposo y han tenido una recuperación rápida mediante este tratamiento que se caracteriza por ser mínimamente invasivo”.

Mitos de células madre

Son muchos los mitos que dan vuelta en torno a la utilización de células madre para recuperar distintos tipos de enfermedades. Un ejemplo claro de ello, es el tumor cancerígeno, puesto que este se caracteriza por multiplicar las células de forma anómala y si uno le inyecta células madre sería como agregar bencina al tumor produciendo un efecto adverso, explica Mardones.

Otro de los casos que no se puede utilizar es ocupar las mismas células madre en caso de una leucemia, puesto que las células ya vienen cargadas genéticamente con dicha enfermedad, si ésta es del tipo genético, por lo que será necesario ocupar células de un donante compatible que no tenga la misma carga genética.

Finalmente, Rodrigo Mardones asegura que para lograr una exitosa intervención con células madre es necesario aplicar un número elevado de éstas, por lo que es necesario multiplicarlas, ya que sólo congelar el tejido, como lo hacen en otros laboratorios, no sería viable a futuro cuando se requieran ocupar y posiblemente estarían todas muertas

Tratamientos comprobados

En Chile, las terapias con células madre validadas están en el área de la traumatología, es por ello que enfermedades tales como la artrosis (cadera, rodilla, etc) y otras lesiones del cartílago articular, necrosis avascular de cadera y pseudoartrosis (o sea huesos que han tenido una fractura y no consolidan), están siendo tratados con células madre. Todas estas condiciones han sido aprobadas para tratar con terapia celular por la Sociedad Internacional de Terapia Celular.

BFL también ha avanzado en la investigación para el tratamiento de la Enfermedad de Crohn y también, el trauma raquimedular en fase crónica.

Adicionalmente y a nivel internacional, se están avanzando en el área de ensayos clínicos para tratar la Enfermedad de Alzheimer, Anemia aplástica, Ataxia hereditaria, Autismo, Cardiomiopatía, Parálisis cerebral, Diabetes tipo 1, Enfermedad injerto contra huésped (GvHD), Encefalopatía hipóxica isquémica, Cirrosis hepática, Lupus, Esclerosis múltiple, Artritis reumatoide, Daño medular y Lesión Cerebral Traumática, entre otras.

Para más información visita http://www.bioscell.cl/

Foto: vía La Tercera.com