Se recomienda consumir líquidos, frutas y verduras, como sandía y espinaca. Entre los tratamientos, la mesoterapia con ácido hialurónico inyecta moléculas que retienen agua para combatir la resequedad y arrugas por deshidratación. 

La exposición solar aporta vitamina D y atrevernos en el mar helado reafirma la piel. Pero estas actividades también tienen un lado B: piel del rostro seca y con arrugas que surgen por deshidratación.

“La piel está sometida deshidratación durante las vacaciones por la transpiración, el viento que reseca y la sal marina”, explica la doctora Carol Estrada de Clínica Avaria.

Otro factor es que la radiación ultravioleta daña las moléculas de ácido hialurónico que de manera natural están en la piel y que cumplen la función de captar y retener el agua que bebemos con el fin de hidratarla.

“Al quedar dañadas, las moléculas de ácido hialurónico dejan de cumplir su papel de hidratar, provocando resequedad y tirantez en la piel, y arrugas superficiales que se profundizarán con los años”, añade.

Prevenir arrugas

Entre los tratamientos que existen para prevenir la formación de arrugas por deshidratación está la Mesoterapia con Ácido Hialurónico, que prepara la piel del rostro antes de exponerla al sol, hidratándola en profundidad.

“Este tratamiento ayuda a prevenir la resequedad cutánea y arrugas producidas deshidratación, en zonas como contorno de los ojos, pómulos y mejillas”, afirma la doctora Estrada.

Este tratamiento se aplica en rostro, cuello y escote. Se inyecta directamente en la dermis de la piel las moléculas de ácido hialurónico que captan y retienen agua como un receptáculo, para protegerla y mantenerla hidratada.

La técnica debe estar acompañada del consumo de aproximadamente 2 a 3 litros de agua diarios, que aportarán el líquido que será retenido en la piel.
“Recomendamos comenzar el tratamiento de cinco sesiones, mínimo diez días antes de vacaciones y continuar al regreso. Los resultados de hidratación, turgencia y luminosidad se evidencian a la semana de iniciado, y si la piel está muy reseca, los efectos son más notorios aún”, explica la experta.

Sandía y espinaca

Para prevenir la formación de arrugas faciales por resequedad de la piel, la especialista recomienda:

– Diariamente beber 2 a 3 litros de agua o líquidos que hidraten como jugos naturales. Bebidas carbonatadas como las cola, el café, té y alcohol producen deshidratación

– Ingerir frutas y verduras con alto porcentaje de agua como, sandía, manzana, tomate, lechuga o espinacas

– Aplicar cremas hidratantes, al menos dos veces al día, pues aunque alcanzan la capa superficial de la piel, ayudan a retener agua. Serum con ácido hialurónico penetran en las capas más profundas de la piel aportando una mayor hidratación

– Aplicar aguas termales para hidratar de manera tópica durante el día

– Consumir alimentos que contienen y que estimulan la producción de ácido hialurónico, como las papas, papaya, mango, palta y soja

– Evitar largas exposiciones al sol, entre las 11:30  y 4 de la tarde y usar siempre protección solar con filtro UVA y UVB.

Foto vía: www.ambitomujer.com