Si usted presenta dificultad para poner atención, tiene tendencia a dejar las cosas sin terminar, maneja mal los tiempos y tiene predisposición a cambiar de rumbo con frecuencia, puede ser que esté sufriendo de Síndrome de Déficit Atencional (SDA). Según la neuróloga de Centros Médicos Vidaintegra, Dra. Carolina Gallegos, el manejo de este mal mejora drásticamente si se logra diagnosticar antes de los 12 años.

El  Síndrome de Déficit Atencional es una disfunción de algunas áreas del cerebro, producto de un déficit de ciertos neurotransmisores. Consiste en la dificultad para prestar atención y mantenerla por períodos prolongados, y quienes la padecen suelen distraerse con estímulos irrelevantes. En la mayoría de los casos, su origen se debe a factores genéticos.

Según la neuróloga de Centros Médicos Vidaintegra, Dra. Carolina Gallegos, los adultos con déficit de atención lo arrastran desde la infancia. “Cuando este trastorno aparece por primera vez en la vida adulta, debe sospecharse de otras enfermedades como depresión, cuadros de ansiedad o apnea del sueño”, asegura la especialista.

Atención con los síntomas

  • Dificultad para mantener la atención enfocada en una tarea
  • Impulsividad en los actos y al comunicarse
  • Hiperactividad
  • Dificultad para iniciar y completar tareas
  • Perder cosas con frecuencia
  • Mal manejo del tiempo
  • Dificultad para planificar y organizar tareas

Tratamiento

Según la Dra. Gallegos, el tratamiento debe ser integral. “Puede incluir intervenciones farmacológicas, psicológicas y de entrenamiento de habilidades de organización y planificación. Dentro de mi experiencia, las terapias que combinan ayuda médica y psicosocial son las más eficaces, tanto en disminución de los síntomas como en el desarrollo y mantenimiento de una mejor calidad de vida para los pacientes”, asegura la especialista.

Cuando la persona afectada sigue un tratamiento farmacológico, se debe recordar que no necesariamente lo hará de por vida, ya que se pueden mejorar los síntomas a través de algunas técnicas de apoyo que faciliten su rendimiento laboral y/o académico, como el uso de agendas, ejercicios de respiración y concentración, entre otros.

Cuándo consultar con un especialista

Se debe acudir a un neurólogo cuando existen dudas respecto a la presentación de este cuadro. “En la consulta se estudiará, a través de una evaluación neuropsicológica, si existe déficit atencional o no. Se realizarán exámenes que descarten otras patologías como cuadros de ansiedad, trastorno del ánimo, inmadurez, disfunciones familiares o síndromes compulsivos”, concluye la neuróloga de Centros Médicos Vidaintegra.

Foto vía: maitecobopsicologainfantil.blogspot.com