Por: Elizabeth Salazar T.
Ambientada en Italia, en la época de postguerra nos muestra a Delia (Paola Cortellesi), una dueña de casa que vive junto a sus hijos y su marido Ivano (Valerio Mastandrea), quien la maltrata cada vez que puede, ella se mantiene estoica y resignada a recibir estos castigos, hasta que le llega un sobre…Una noticia revoluciona la cotidianidad, Marcella (Romana Maggiora), la hija mayor, se compromete con un simpático chico de clase media, llamado Giulio (Francesco Centorame), la joven se siente enamorada, pero también anhela escapar de su familia.
Esta película trata de forma asertiva, una dolorosa historia, Delia vive en una humilde casa, en la Italia de los años cuarenta, su marido es el proveedor y como tal, se siente con todos los derechos de hacer lo que le de la gana, es prepotente y siente que su mujer es su empleada, la trata en forma despectiva y violenta. Los hijos de la familia han crecido viendo esta situación y sin duda, los ha afectado, en especial a Marcella, que no entiende las razones de su madre para aceptar los golpes y gritos de su padre.
Filmada bellamente en blanco y negro, esta película nos remece porque muestra una realidad que era muy normalizada durante esa época, Delia se resigna a aceptar su destino, hasta que le van sucediendo una serie de hechos que la hacen replantearse, darse cuenta de lo valiosa que es. Ella anhela que sus hijos y en especial Marcella, tengan otras posibilidades en la vida y ayuda un poco al destino para que así ocurra…
El final de este film, está marcado por un hecho histórico y creo que es un cierre muy emotivo, para Delia. La protagonista y directora de “Siempre habrá un mañana”, es Paola Cortellesi, quien realiza una gran actuación y una película que nos recuerda a esas historias que escuchamos de nuestras abuelas o madres, sobre alguna mujer que conocieron o incluso de ellas mismas. Viéndola nos invita a reflexionar acerca de las posibilidades que tenemos actualmente y tomar conciencia sobre la violencia con que los hombres trataron y algunos aún tratan a sus mujeres (tristemente). Dolorosa, necesaria y esperanzadora.
Se estrena el 27 de junio en cines.
Directora: Paola Cortellesi
Duración: 118 Minutos.