Este 17 de octubre se conmemora el día mundial contra el dolor, un tema cada vez más relevante en nuestro país. Según las estadísticas, en Chile la prevalencia de dolor crónico es de un 32%, siendo el 65% de origen músculo-esquelético, donde las principales causas son el dolor lumbar y la artrosis. Esto causa un alto impacto y deterioro en la calidad de vida con un gran ausentismo laboral, especialmente, en el grupo de edad con mayor actividad profesional. Incluso, según el estudio ACHS UC Radiografía del dolor en Chile, una de cada tres mujeres presenta dolor crónico.

“El mejor tratamiento para el dolor, demostrado por la mayoría de los estudios científicos, es el ejercicio físico y la educación a las personas respecto a su condición de salud. Esto, complementado con quiropraxia, es una herramienta muy potente para mejorar la calidad de vida. Es más, el ejercicio físico ha demostrado ser un tratamiento efectivo para más de 26 condiciones de salud: enfermedades psiquiátricas, neurológicas, metabólicas, cardiovasculares, pulmonares, desórdenes músculo-esqueléticos y cáncer”, señala Cristóbal del Campo, quiropráctico de Clínica Talus.

Educación en neurociencias del dolor, ¿en qué consiste este nuevo tratamiento?

Sin duda, las emociones, creencias y experiencias vividas influyen en el funcionamiento de nuestro organismo, generando diferentes patologías, siendo una de ellas el dolor crónico. Por eso, no solo es importante tratar el dolor desde el punto de vista médico, sino también, de una forma más completa, y justamente eso es lo que propone el tratamiento llamado Educación en Neurociencias del Dolor.

“La educación en neurociencias del dolor nace como una forma de tratamiento enfocado en tratar a la persona en todos sus aspectos, no sólo en su estructura, sino además en sus creencias y emociones. Es una técnica de tratamiento efectiva, sobre todo cuando se complementa con un trabajo multidisciplinario. Los pensamientos y creencias pueden impactar directamente en el dolor y en la función del cuerpo. Por eso es fundamental que el profesional de la salud, se preocupe de evaluar y tratar no solamente los aspectos estructurales, sino además los psicológicos y sociales”, explica Cristóbal del Campo, quiropráctico de Clínica Talus

La educación en neurociencias del dolor se recomienda principalmente en pacientes con dolor crónico, es decir, en pacientes que su dolor ha durado más de tres meses y su principal beneficio es poder tratar dolencias crónicas que no han tenido resultados con otro tipo de intervenciones. Para el éxito de este tratamiento es primordial realizar primero una completa evaluación del paciente con el objetivo de determinar sus creencias respecto a su dolor y también como está en su aspecto emocional, ya que un cuadro de estrés, ansiedad o depresión repercuten directamente en el dolor.

Pero este no es el único tratamiento, sino que también es recomendable la quiropraxia, “ya que su principal herramienta terapéutica es el ajuste vertebral que consiste en una maniobra manual de alta velocidad y baja amplitud de movimiento, que ayuda a mejorar o corregir los trastornos neuromusculares por alteración del control del movimiento del sistema nervioso y el dolor agudo o crónico de las personas. Es decir, los ajustes quiroprácticos tienen efectos neurofisiológicos en el control motor y el dolor”, señala Cristóbal del Campo, quiropráctico de Clínica Talus

La quiropraxia es recomendable en el caso de tener alguna lesión que involucre alguna articulación, músculos o del sistema nervioso en las diferentes regiones del cuerpo humano, dolor de origen musculoesquelético agudo o persistente.  Así como también, para personas sin patologías y que sólo buscan bienestar y salud cada cierto tiempo, con el fin mejorar sus capacidades físicas y/o calidad de vida.

El especialista agrega que “según los últimos consensos quiroprácticos en base a la evidencia científica, la quiropraxia obtiene mejores resultados en dolores de columna lumbar, dolor cervical o de cuello, dolor de cabeza por tensión o de origen cervical, osteoartritis o artrosis de rodilla y cadera, fibromialgia, entre otras”.

En resumen, la quiropraxia, kinesiología y la educación en neurociencias del dolor,  son excelentes tratamientos para mejorar la calidad de vida de las personas, disminuir, e incluso terminar con el dolor que les aqueja, sin cirugías y de manera más natural.

Más información en www.clinicatalus.cl y @clinica_talus