- La Doctora Paula Klein, con un magíster en nutrición, señala los peligros de comer setas encontradas en áreas silvestres.
Recientemente una familia de Talcahuano pasó por una de las experiencias más traumáticas de su vida, que aún no tiene un desenlace. Resultaron intoxicados al comer hongos venenosos y el caso más grave lo presentó Javier Oliva Guzmán de 56 años, quien fue trasladado al hospital del Salvador en Santiago, donde se encuentra en riesgo vital y actualmente es prioridad nacional para un trasplante de hígado.
Todo ocurrió cuando él y otros dos integrantes de su familia realizaron una excursión cerca de Talcahuano y recogieron unas setas que posteriormente cocinaron y consumieron, resultando los tres intoxicados.
Es por ello que la Doctora Paula Klein, nutrióloga, con un magíster en nutrición del Centro médico Klein y Asociados explica que aunque los champiñones son muy apetitosos en preparaciones como salsas, pizzas y risottos, algunas variedades de setas son venenosas y pueden resultar muy peligrosos para el ser humano.
La experta aconseja que como en Chile encontramos mucha variedad de hongos en bosques y paisajes precordilleranos, si no se tiene experiencia en reconocer cuáles son comestibles y cuáles no, es mejor no recogerlos y aprender con alguien que sí sepa o comprarlos directamente en lugares establecidos. Incluso en países donde es una práctica común recoger setas, hay una tradición de enseñar a las personas desde pequeñas a reconocer cuáles son comestibles, pues suelen parecerse a los hongos venenosos.
De todas maneras, la experta indica que los que por ningún motivo debieran consumirse son aquellos que tienen:
– Anillos y láminas de color blanco o las que presentan una especie de verrugas o escamas blancas.
– Las que presentan un color ocre-rojizo y son de tamaño pequeño.
– Color blancuzco o gris claro y tienen sospechosas láminas de color anaranjado o rosado.
– Las lepiotas pequeñas, igualmente venenosas, tienen menos de cinco centímetros, por lo que es fácil reconocerlas.
– Las que tienen un aspecto atigrado del sombrero.
