- Un 40% de las patologías que afectan en forma de dolor de espalda, corresponden a un factor genético, siendo muy difícil prevenirlas.
- Sin embargo, existen algunas conductas que ayudarán a cuidar nuestra espalda como mantener un peso adecuado y realizar actividad física, según las recomendaciones de los especialistas de Clínica Ciudad del Mar.
Seguramente, más de alguna vez, hemos escuchado a alguien lamentarse por constantes dolores en su espalda y muchas veces no reparamos en la importancia que tiene para nuestro organismo la columna vertebral. Es el principal soporte de nuestro cuerpo y es gracias a ella que podemos mantenernos de pie, aguantar nuestro peso y desplazarnos.
Según nos comenta el Traumatólogo de Clínica Ciudad del Mar, experto en columna, Dr. Juan Pablo Otto San Martín, las patologías más frecuentes que pueden afectar a nuestra espalda son la lumbociática (irritación del nervio ciático); algunas deformidades propias de la columna como la escoliosis (desviación), la espondilolistesis (deslizamiento de una vértebra), la cifosis (curvatura) y los dolores lumbares.
Estos últimos se presentan mayoritariamente en personas sobre los 60 años, producto del envejecimiento, lo que en términos médicos se conoce como patologías degenerativas. A diferencia de lo que ocurre con la escoliosis y las hernias lumbares que afectan principalmente a personas menores de 40 años.
Si bien estas patologías vienen dadas en un 40% por un factor genético, es decir, son heredables y resulta difícil prevenirlas, existen algunas conductas que ayudarán a cuidar nuestra espalda como mantener un peso adecuado y realizar actividad física de manera regular y acorde a la edad de cada individuo.
Asimismo, es fundamental poner atención a ciertos síntomas que nos indicarán que puede tratarse de algo más complejo. Respecto del dolor lumbar debemos estar atentos cuando éste haya persistido por un periodo de dos o tres semanas y no haya respondido en forma satisfactoria a los tratamientos en base a analgésicos y antinflamatorios.
Otras señales que nos ayudarán a detectar que algo no anda bien, es cuando el dolor está asociado a fiebre, pérdida de fuerza o sensibilidad de una extremidad, una baja de peso sin causa aparente o la persona tenga antecedentes de algún cáncer previo. Asimismo, hay que poner atención si el dolor lumbar se irradia hacia la pierna, más abajo de la rodilla.
Cuando presente alguna de estas sintomatologías es importante que consulte con algún especialista para que le realice una evaluación clínica y, dependiendo del tipo de patología, le efectúe algunos exámenes complementarios a través de una radiografía, escáner o resonancia.
Las personas que tienen indicación absoluta de someterse a una intervención quirúrgica, son aquellas que poseen un compromiso neurológico, es decir en aquellos casos donde ha habido pérdida de fuerza o sensibilidad, pues el objetivo de la cirugía, es quitar el dolor y evitar el daño neurológico permanente de las extremidades.
Otros pacientes que deberán optar por la cirugía son aquellos que sufren de escoliosis severa, es decir, cuando la columna tiene una desviación de más de 50 grados.
Finalmente, la indicación relativa será para aquellas personas que habiéndoseles realizado en forma correcta los tratamientos conservadores y luego de un periodo superior a seis semanas, no hayan respondido de manera satisfactoria.
En Clínica Ciudad del Mar contamos con profesionales especializados en traumatología de columna, que lo ayudarán a detectar tempranamente los diferentes problemas que pueda presentar su espalda, otorgándoles el tratamiento adecuado para evitar que un pequeño dolor se transforme en algo más severo.