- Se ha transformado en una tendencia en los últimos días a nivel mundial. Es motivo de comentarios en redes sociales e incluso cuenta con algunos embajadores más que conocidos como Leonardo Di Caprio y el ex futbolista Ronaldo, quienes lucen un abdomen abultado en vez del clásico “six pack”.
- Sin embargo los especialistas encienden las alarmas y ven con distancia esta moda que, según califican, tiene poco de saludable.
Hombres y mujeres con abdomen abultado no es algo raro de ver en nuestras sociedades. Incluso muchos se refieren a esta aglomeración en nuestro abdomen como “la guatita regalona” o la “ponchera cervecera”. Se trata de una característica que se ha transformado en tendencia durante la última semana, luego que el periódico español ABC mostrara esta condición como una característica habitual en los hombres, que ven cada más lejos la figura escultural de un abdomen plano por esta vía un poco más relajada.
Sin embargo la voz especializada es clara frente a este tema y no duda en derribar muros y mitos que giran en torno a la ficticia idea de ser un “fofisano”. “Es una tendencia que sale a partir de un artículo que se popularizó y hoy mucha gente está hablando sobre este tema en positivo. Sin embargo, la grasa abdominal es muy peligrosa”, señala la nutricionista de Clínica Ciudad del Mar Javiera Quijada.
De acuerdo a la especialista, “esta obesidad central puede producir diabetes, resistencia a la insulina, problemas cardiacos, porque se acumula alrededor de los órganos más importantes del cuerpo, poniendo en riesgo su buen funcionamiento”.
Tras esta aclaración que derriba las posibilidades de transformar al “fofisano” como un estilo de vida o un modelo a seguir, cabe destacar cuáles son los aspectos negativos que implica contar con un abdomen similar al del actor Leonardo Di Carpio, quien en diversas imágenes luce lo que popularmente en Chile se conoce como “ponchera”.
“Está comprobado que la grasa visceral es una de las más peligrosas que existe, debido a que produce sustancias tóxicas que se liberan alrededor de los órganos importante, produciendo inflamación y enfermedades metabólicas”, señala Javiera Quijada.
¿Cómo identificar el riesgo?
Llevar una vida saludable implica cambiar hábitos importantes en materia de alimentación y actividad física. Estas recomendaciones, según la nutricionista Javiera Quijada, son las vías indicadas para mantener un peso apropiado a nuestras características.
Pero si alguna persona ha desarrollado este común tipo de obesidad, puede utilizar ciertos recursos para identificar los riesgos a los que se expone. “Existe una forma de calificar nuestro estado en relación a esta obesidad central. Esto implica medir el perímetro de la cintura. En el caso de las mujeres, cuando este perímetro es mayor a los 88 centímetros; y en el caso de los hombres 120 centímetros, estamos hablando de un riesgo que puede conllevar hasta problemas de carácter respiratorio”, aclara.
“La alimentación debe ir de la mano con la actividad física. No solo basta con evitar las frituras y la comida chatarra, sino preocuparse de tener una actividad física diaria”, concluye.