Es la neoplasia que más afecta a la población femenina, convirtiéndose en la principal causa de mortalidad oncológica cada año. En el último reporte realizado por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, se estimó que en Chile hay más de 5.000 casos y 1.600 fallecimientos asociados a este diagnóstico.
El aumento de campañas y la difusión de las medidas preventivas han aportado en la concientización ciudadana respecto al cáncer de mama y sus síntomas. No obstante, esta patología sigue siendo la más diagnosticada en mujeres chilenas y la principal causa de muerte por este tipo de enfermedad.
En el último reporte realizado por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se registraron 5.331 mujeres diagnosticadas y 1.674 fallecidas por cáncer de mama en Chile. Sin embargo, esta realidad no solo afecta a nuestro país, ya que a nivel global se estima que una de cada ocho desarrollará esta enfermedad a lo largo de su vida.
La doctora Julieta Robin, especialista en cirugía oncológica mamaria de Clínica Santa María, sostiene que debido a que existe una mayor concientización sobre el cáncer de mama, hay una mayor pesquisa en mujeres jóvenes bajo los 40 años. “Actualmente hay mejores métodos de diagnóstico, más alerta, la población está más consciente de esta enfermedad, sobre todo cuando hay pacientes de alto riesgo por historia de la madre o muchos casos en la familia, entonces empiezan a hacerse los controles antes”, afirma.
En lo que respecta a la edad de la población femenina con este diagnóstico, aproximadamente un 5% del total corresponde a mujeres menores de 40 años según la especialista, mientras que siete de cada 10 se encuentran sobre los 50 años, razón por la que doctores recomiendan realizarse chequeos más a menudo.
Por su parte, la doctora Marcia Valenzuela, especialista en cirugía mamaria de Clínica Ciudad del Mar, sostiene que a los 40 años el cáncer suele tener un comportamiento biológico más agresivo si se compara con el cáncer en la mujer de mayor edad. “El pronóstico tiende a ser menos positivo y la mortalidad es mayor. Por lo mismo los tratamientos suelen ser más complejos y frecuentemente necesitan quimioterapia para disminuir el riesgo de recaídas futuras que afecten a otros órganos distintos de la mama”, explica.
Los síntomas en la población femenina de menor edad pueden pasar desapercibidos, por lo que la doctora Robin asegura que las mujeres bajo ese rango etario sólo acuden a realizarse exámenes cuando las señales se vuelven notorias. “Vienen a la consulta porque se tocan un bultito en la mama o en la axila, o tienen secreción sanguinolenta espontánea por un pezón, entonces ahí se hacen los estudios y se encuentra el cáncer. Es por eso que generalmente las mayores de 40, que se hacen estudios todos los años se encuentran más por un screening o prueba de detección”, comenta.
Asimismo, destaca la importancia de realizarse mamografías todos los años, a partir de los 40 años, ya que diagnosticar el cáncer de manera temprana se traduce en un mejor pronóstico y tratamientos menos invasivos. “Respecto al diagnóstico, las pacientes jóvenes tienen mamas más densas, lo que hace menos eficiente a la mamografía para detectar tumores. Así que habitualmente en este grupo necesitamos. Además, complementar con otras imágenes como ecografía mamaria y resonancia de mama para planificar el tratamiento”, comenta la cirujana de mama de Clínica Santa María.
Cáncer de mama hereditario
Las mujeres que tienen antecedentes familiares de este tipo de neoplasia pueden realizarse una prueba genética para conocer las probabilidades de desarrollar esta enfermedad y así optar por un tratamiento adecuado y oportuno.
Afortunadamente, el cáncer hereditario de mama es poco frecuente, ya que son solo entre 5 y 10% de los casos. Según la doctora Marcela Amar, cirujano de mama de Clínica Dávila, en su mayoría son esporádicos, es decir, la causa es multifactorial y es más frecuente en mujeres desde los 50 años.
¿Cuándo consultar a un especialista?
Se recomienda realizar una visita anual al ginecólogo y realizar los chequeos correspondientes. Sin embargo, si la mujer presenta los siguientes síntomas, se aconseja asistir lo antes posible a evaluación.
- Si detecta un bulto en una mama o en ambas.
- Ante cambios en textura de la piel o color de los senos.
- Cuando existe enrojecimiento de la piel en esta zona.
- Si es que un pezón se desplaza de lado o cambia de dirección.
- Si es que existen antecedentes familiares.