Por: Elizabeth Salazar T.

Una de las biopic más esperadas llega a la cartelera este jueves, es que para toda esa generación que creció durante los años 90 escuchando las canciones de Whitney Houston, ella forma parte de la banda sonora de nuestras vidas.

La película, muestra a Whitney Houston desde su niñez como integrante del coro dirigido por su madre en Nueva Jersey hasta cuando se convirtió en una estrella de talla mundial, transformándose en una de las artistas más vendidas y premiadas de todos los tiempos y paralelamente, nos revela aspectos de su vida familiar y cómo su carrera influyó en esta.

Como muchas de las grandes estrellas, Whitney tuvo un difícil camino para llegar a la fama. Al cantar era presionada por su madre, quien buscaba en su interpretación la perfección y además, provenía de una familia donde había violencia intrafamiliar, hechos que la marcaron sin duda. Siempre soñó con ser cantante, sin embargo, cuando cumplió su sueño, se vio enfrentada a duras exigencias y por lo demás, tuvo que mantener a una gran parte de su familia y amistades con su trabajo.

Esta biopic hace un retrato muy emotivo de la cantante, hay escenas donde la actriz Noemi Ackie, luce igual a Whitney, pero más allá del parecido físico, creo que si algo captó fue la esencia de ella, la pasión con que cantaba, lo innovador que fue en su canto, en su estilo, en su forma de vestir y en sus dichos. Para quienes seguimos su carrera, es impresionante ver como recrearon sus videoclips o aquellos momentos más emblemáticos en su vida, por ejemplo, aquella vez que cantó el himno nacional durante la transmisión del Súper Tazón.

Un instante decisivo y que cambia todo su rumbo, es cuando Whitney conoce Bobby Brown (Aston Sanders), el hombre que se convertiría en su marido, la relación fue tormentosa y constantemente  fue cubierta por la prensa acaparando portadas. Aquí, comienza su declive, debido a que, se ve sobrepasada por todo lo que acontece a su alrededor y se refugia en adicciones.

Por otro lado, una figura importante que aparece en el film es Clive Davis, productor de Whitney, quien es interpretado de muy buena forma por Stanley Tucci. Siempre hay alguien clave en el éxito de un artista y sin duda, él lo fue para la cantante.

Un bonito homenaje para Whitney Houston, es inevitable cantar y emocionarse con su vida. Si es fanático de esta cantante o de la música en general, esta película le va a encantar.

Se estrena en cines el 2 de febrero.

Director: Kasi Lemmons

Duración: 144 Minutos

Distribuye Andes Films Chile

Reseña publicada en: https://aquitedateamos.cl/