Por: Elizabeth Salazar T.

Desde que esta película se estrenó en el pasado Festival de Venecia, hemos estado escuchando elogios que aumentaban las expectativas y ganas de verla. Debieron pasar 16 años para que Todd Field regresará a la dirección con “Tár” y con una protagonista que ya ha ido acumulando diversos premios por  su interpretación, entre los que destaca la Copa Volpi como Mejor Actriz en Venecia.  

La película trata de Lydia Tár (Cate Blanchett), una exitosa directora de orquesta alemana. Es una mujer precursora dentro de su profesión, por lo que es muy admirada y respetada. Ella se encuentra en un momento clave de su vida, puesto que, está a días de grabar la “Quinta Sinfonía” de Mahler y además, prepara el lanzamiento de un libro sobre sus memorias. Durante este período, todo parece ir cuesta abajo debido a algunos problemas con su entorno más cercano, principalmente con su pareja Sharon (Nina Hoss) y con Francesca (Noémie Merlant), primer violín de la orquesta y quien también, se desempeña como su asistente. Por otro lado, surgen acusaciones públicas en su contra que afectan su prestigio. En una época de redes sociales, Lydia se verá enjuiciada y cancelada.

Una de las primeras reflexiones que me surgen tras ver esta película tiene relación con el machismo en la sociedad, si la situación de Lydia Tár hubiera sido enfrentada por un hombre ¿tendría el mismo tratamiento? Su personaje se expresa como una mujer poderosa, que en apariencia se ve inquebrantable y con una actitud displicente frente al mundo, no obstante, la vida le pone dificultades en varios ámbitos, a pesar de lo que le sucede Lydia trata de mostrarse segura frente a los músicos de su orquesta, como dice el dicho “ella es quien lleva la batuta” en todos los aspectos. 

Hemos escuchado muchos elogios acerca de la interpretación de Cate Blanchett y puedo decir que son todos merecidos. La actriz se preparó para este papel y aprendió a tocar piano, hablar alemán y a dirigir una orquesta para convertirse en  Lydia Tár y ser convincente, realmente lo es. De hecho, mis escenas favoritas son las de ella con batuta en mano, donde se contornea al ritmo de la música y prácticamente parece estar flotando. En esos momentos, aparece la sensibilidad y pasión de esta mujer inmutable.

Un dato con respecto a su realización: para que la película se viera de forma más real, se incluyó a parte de la Filarmónica de Dresden en su elenco, incluso algunos músicos actuaron con diálogos, entre ellos se encuentra Dorothea Plans Casal, Fabian Dirr y el Concertino Wolfgang Hentrich. La encargada de crear la música fue la compositora islandesa Hildur Guonadórttir (ganadora del Oscar por la banda sonora del “Joker”).

Una película feminista, con una gran historia y reflexión acerca de si se puede separar la obra de su autor. Si le gusta la música, vaya a verla, una trama interesante acompañada de una bella música.

Se estrena en cines el 26 de enero

Director:Todd Field

Duración: 156 Minutos

Distribuye: Andes Films Chile

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