En el marco de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, Natalia González, matrona de Clínica Bupa Santiago, nos entrega estrategias para enfrentar el cese de esta etapa de manera paulatina y empática, tomando en cuenta las necesidades y sentimientos tanto de los niños como de las mamás.

Por definición, el destete es el último paso de la lactancia materna y puede realizarse a través de diferentes estilos, tal como mamás y bebés existen. Uno de ellos es el destete respetuoso, que es cuando la madre ha tomado la decisión de ponerle fin a la lactancia, pero quiere hacerlo de manera gradual, respetando los tiempos que demore su hijo en acostumbrarse. En la Semana Mundial de la Lactancia Materna, la matrona Natalia González de Clínica Bupa Santiago nos explica qué pasos seguir.

“Cuando la mamá ya ha decidido suspender la lactancia, debemos estar atentos a las necesidades y sentimientos de los niños y niñas, pero también de las madres. Muchas veces los destetes respetuosos son lentos, ya que la lactancia materna no solo aporta alimentación nutricional, sino también emocional”, explica Natalia González, matrona de Clínica Bupa Santiago y asesora especialista en lactancia.

Los motivos

                De acuerdo a lo que explica la experta, también es importante considerar las razones por las que la mamá decide destetar y respetar su decisión cualquiera sea la causa. “A veces lo hacen por presión social (sobre todo en mayores de 1 año); por razones laborales (ingreso al trabajo); por cansancio; por dolor; por agitación mamaria o por la falsa creencia de que al retirar el pecho materno la guagua va a dormir toda la noche”, señala Natalia.

Consejos prácticos

●        No ofrecer, pero tampoco negar. Aquí la clave es distraer, sacar del foco.

●        Involucrar a un tercero que ayude y acompañe en el proceso, en toda la parte práctica.

●        Anticipar las situaciones en las que el niño querrá leche: si es por hambre, tener una leche o comida preparada; si es por sueño, comenzar a bajar las revoluciones antes y ocupar otra estrategia para hacerlo dormir.

●        Considerar retirar leche del pecho, dejando siempre algo adentro para ir disminuyendo la producción de forma paulatina. Se pueden aplicar compresas frías al terminar para bajar la inflamación.

●        Entender que el fin de este proceso es similar a un duelo y que por lo tanto pueden haber cambios conductuales, por lo que lo más recomendable es tomarlo con mucha paciencia y amor.

Qué esperar según la edad

                De acuerdo a lo que explica Natalia, el comportamiento de los niños frente al destete cambia mucho según la edad. “En menores de 6 meses no tiene mayor complicación; tienden a agarrar la mamadera sin problemas. Entre esta edad y el año, ya saben dónde sale leche, por ende tienden a buscar el pecho. Es más difícil ofrecer mamadera. Aquí es preferible optar por el vaso directamente. Entre el año y los dos, generalmente se lo toman mal e intentan tomar sí o sí. En estos casos podemos conversar con ellos y explicarles que la mamá está muy cansada. Sobre los dos años, además aplazar las tomas, se puede fijar una fecha en calendario y al llegar realizar una ceremonia simbólica del cierre de esta etapa”, cuenta la especialista en lactancia.

                Según la OMS, lo ideal es mantener la lactancia materna exclusiva (sin solidos ni agua) los primeros 6 meses de vida y luego introducir alimentos complementarios ojalá manteniendo la lactancia materna hasta los  2 años. “Pero independiente de la edad de bebé, es la madre quien decide hasta cuándo da de lactar. Es una decisión muy personal. Pero lo hay que tener muy claro es que la lactancia materna nunca va a ser perjudicial, porque la leche no se transforma en agua. Todo lo contrario: es un fluido que está vivo y que cambia de acuerdo a los requerimientos de nuestros hijos”, explica Natalia González.