La pandemia por coronavirus nos ha obligado a cambiar nuestra forma de vivir, lo que también ha tocado nuestro rol de padres, al que hoy debemos sumar otras responsabilidades. Así, muchos papás ya sufren de un agotamiento emocional y físico. Acá te enseñamos a enfrentarlo.

Por Rebeca Ubilla M.

Nadie dijo que ser mamá o papá fuera fácil, pese a que se trate de la tarea más maravillosa que podamos tener. Sin embargo, los tiempos que vivimos, enfrentando una pandemia por coronavirus, nos han puesto esta experiencia mucho más difícil.

Los casi dos meses de encierro, la falta de redes de apoyo -como abuelos, colegio o jardín- para poder tomarnos un momento libre, nos están pasando la cuenta y ya son muchos los padres que empiezan a mostrar inevitables signos de cansancio, tanto emocional como físico.  A esto, los especialistas han llamado agotamiento parental.

Para saber cómo enfrentarlo recurrimos al  documento publicado por los especialistas de la Escuela de Sicología de la Universidad Adolfo Ibañez llamado “Cómo evitar el agotamiento parental en cuarentena”. Acá lo que debes saber.

¿Cuáles son las señales?

-No tener fuerza para levantarse de la cama y hacer frente a las demandas cotidianas de la crianza.

-Funcionar de manera automática, cumpliendo con lo estrictamente necesario y de forma distanciada emocionalmente de los niños.

-No sentir placer en la crianza, cuando ante si se experimentaba, lo que lleva sentir culpa y angustia.

¿Cómo afrontarlo?

-Confía en ti como mamá o papá.

-El hecho de que sus hijos estén en casa no significa que tengas que pasar los días enteros jugando con ellos; y menos jugando a juegos que no disfrutas.

-Sé flexible. Algunas normas tendrán que relajarse y otras incorporarse.

Involucrar a tus hijos en las tareas de la casa. Explícales la nueva situación y la necesidad de trabajo en equipo.

-No dudes en estructurar los días de tus hijos. Tómate un par de horas para explicarles el valor de planificar sus días y su semana. Incluye momentos donde tus hijos jueguen juntos y otros, donde cada uno se cuide solo.

-Elige tus peleas. Es imposible estar en todos los frentes y no es un buen momento para discutir con tus hijos. ¡Esto sólo puede generar que la situación sea intolerable para todos!

– ¡Deja de pretender ser la Mujer Maravilla o Superman!

– Cuidarse unos a otros.

Si ninguno de ustedes está afectado por el coronavirus, valora tu buena suerte y toma la situación con filosofía

Cuando sientas que te estás desbordando, toma aire fresco (¡literalmente!).  Y si realmente te estás asfixiando por la situación, te sientes desbordado y no sabes qué hacer al respecto, llama a un profesional de la salud mental, psicólogo o psiquiatra.