- Se estima que una de cada 10 personas presenta esta condición que puede afectar la autoestima y la vida social.
Una sonrisa es sinónimo de felicidad, alegría y buenos momentos. Sin embargo, para muchas personas la situación es menos agradable al momento de sonreír. Nos referimos a quienes se ven afectados por la denominada “sonrisa gingival”, una condición que expone de sobremanera las encías cuando se esboza una sonrisa, evidenciando una relación desproporcionada con los dientes.
“La sonrisa gingival se puede presentar por el desarrollo excesivo en sentido vertical y horizontal del hueso maxilar superior, que oculta los dientes bajo el labio inferior y deja al descubierto una gran cantidad de encía; por el crecimiento anormal de ésta hacia la corona del diente” asegura la Dra. Pamela Ruiz, Periodoncista de la clínica Dentimagen (www.dentimagen.cl)
“La denominada hiperplasia gingival, se produce debido a la erupción pasiva incompleta de las piezas dentales, o en algunos casos por el escaso desarrollo del labio superior. Estas situaciones provocan la impresión de tener dientes más pequeños en relación a la encía; en casos como estos el especialista debe evaluar la causa de esta situación para plantear un tratamiento estético”, explica la especialista.
Y aunque no se trata de una enfermedad, este tipo de sonrisa trae consigo más de algún problema estético al crear una línea de sonrisa muy baja, mostrando mucho componente rosado y poco componente blanco.
De acuerdo a la causa de la condición, “existen tratamientos que ayudan a armonizar la apariencia de dientes y encías. “Podemos recurrir a cirugía maxilofacial para reposicionar los huesos maxilares que se han desarrollado desproporcionadamente, en conjunto con tratamiento de ortodoncia; o a una cirugía plástica periodontal, intervención menor que se realiza para eliminar las encía y, en algunos casos, tejidos óseos cirundantes y dejar contornos mas armónicos, acompañado en algunas ocasiones de procedimientos de rehabilitación, como por ejemplo, carillas dentales”, dice Dra.Pamela Ruiz.
Para las personas que no desean someterse a operaciones o tratamientos, existen otras formas de disimular la sonrisa gingival, como atraer la mirada hacia los ojos o el cabello, utilizando maquillaje o un lindo peinado. “El paciente tiene que evaluar si está dispuesto a soportar una cirugía netamente estética, porque la sonrisa gingival no afecta en lo absoluto las funciones normales de la dentadura”, aclara la profesional.
¿Y qué pasa con los dientes cortos?
Al igual que la sonrisa gingival, tener dientes cortos no es considerado una patología pues, la mayoría de las veces, se trata de una característica heredada o propia de la persona. Sin embargo, el menor tamaño de las piezas dentales podría ser un efecto del bruxismo; es decir, del mal hábito involuntario de apretar los dientes durante la noche y a veces incluso durante el día. “En este caso, lo importante es ir al origen del problema tratando el bruxismo de manera integral mediante planos de relajación y terapias multidisciplinarias para combatir el estrés”, recomienda la profesional de Dentimagen. “Luego puede evaluarse el uso de carillas para alargar los dientes y mejorar la parte estética, todo esto bajo la supervisión de un especialista”.