Este domingo celebraremos nuevamente a nuestros Padres en su Día, una buena ocasión para regalonearlos y realizar un panorama juntos. Ver una buena película siempre es una instancia para compartir un grato momento. En el cine tenemos algunos films protagonizados por padres notables, a continuación les recomiendo cuatro de mis cintas favoritas:
No se aceptan devoluciones (2013)
Esta película protagonizada por Eugenio Derbez que representa a Valentín, un hombre mujeriego y egoísta cuya vida de un vuelco completo, cuando debe hacerse cargo de su hija, la que tuvo producto de una aventura. Con la intención de devolver la niña a su madre, Valentín comienza un viaje a Los Angeles, pero tras la convivencia diaria, Valentín logra convertirse en un verdadero padre que da todo por su hija. Desgraciadamente se ve enfrentado a una difícil situación…
Una película que tiene momentos de humor y otros muy emotivos. Una bella historia de cómo un hombre que vive para si mismo, ve su vida transformada con la llegada de su hija, aunque al comienzo luche contra esta situación. Vale la pena verla, de esos films que te atrapan y hacen que los minutos pasen rápidamente.
Todos están bien (Everybody’s fine 2009)
Esta película nos cuenta la historia de Frank Goode (Robert de Niro), un hombre jubilado y que ha quedado recientemente viudo. Al comienzo podemos ver como Frank espera la visita de sus hijos junto a una parrilla y un buen vino, pero sólo llega una de sus hijas –son dos mujeres y dos hombres- los demás se excusan por no poder asistir. Debido a esto Frank decide ir a visitarlos y ver cómo se encuentran. Para lograr su objetivo deberá recorrer diversos lugares, dado que se encuentran en distintas ciudades. David (Austin Lysy) es pintor y se encuentra en Nueva York, Amy (Kate Beckinsale) vive Chicago y tiene un hijo, Robert (Sam Rockwell) es músico y reside en Denver y, por último, Rosie (Drew Barrymore) está en las Vegas.
Un film emotivo donde podemos ver los grandes esfuerzos que realiza el protagonista para cambiar la relación distante que hay entre él y sus hijos. Pero el amor y dedicación del este padre, muy bien interpretado por De Niro, permite lograr la cercanía. En resumen, un bonito mensaje que muestra la preocupación eterna de los padres por el bienestar de sus hijos.
En busca de la felicidad (The Pursuit of Happyness, 2006)
Este film basado en la vida de Chris Gardner (Will Smith), un hombre que lucha incansablemente por alcanzar sus sueños y dar un mejor pasar a su pequeño hijo. Con este propósito postula para una pasantía en Dean Witter Reynols (una corredora de bolsa famosa), lo que para él es una gran oportunidad de aprender el rentable oficio de corredor de bolsa, pero con la difícil condicionante de no recibir renta fija por seis meses. Como consecuencia Chris, pierde su hogar al no tener dinero para pagar su renta, esta situación lo lleva a dormir en hogares de paso, hoteles baratos e incluso en el tren subterráneo. Siendo esta última escena -para mí gusto- las más desgarradoras de todo el film, pues muestra hasta que limites puede llegar lo que un padre puede hacer por amor a su hijo.
Una historia inspiradora donde el dicho “querer es poder” queda clarísimo. Notable interpretación de Will Smith, realmente convence en este papel.
La vida es bella (1997)
De esas películas que uno puede ver una y otra y otra vez. No fue exagerada la cantidad de premios que ganó cuando apareció, incluyendo el Oscar a Mejor Película Extranjera.
El film nos narra la historia de una familia judía en la Italia de la Segunda Guerra Mundial que es tomada prisionera, y cuyo padre, Guido Orifice (Benigni), tiene como propósito salvar a su hijo del genocidio nazi.
Lo más lindo del personaje de Benigni, es que intenta que el niño se abstraiga de lo que está viviendo, contándole historias e inventando juegos, para entretener al pequeño y evitar su sufrimiento.
Una maravillosa historia de amor paternal, que cada vez que se ve logra causar la misma emoción de la primera vez que la miró. Un film que no deja a nadie indiferente.
