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Las operaciones estéticas son cada día más comunes, pero no por ello menos riesgosas. Ante esto, es recomendable asesorarse con un médico especialista acreditado y elegir un centro que cumpla con lo necesario para la intervención.
Si bien la medicina y tecnología han evolucionado notoriamente siendo cada vez más difícil sufrir algún tipo de complicación durante una cirugía o después de ella, siempre existe la posibilidad de que se presente algún inconveniente o que el organismo no reaccione como se espera.
Periódicamente vemos en los medios de comunicación casos de pacientes que tras someterse a un procedimiento estético no quedan con los resultados esperados o que, incluso, los han llevado a poner en riesgo su vida.
Es por esto que se hace indispensable que el hospital, clínica o centro de salud donde se realice la operación cuente con todos los recursos necesarios para atender cualquier tipo de emergencia o inconveniente que se pueda presentar: el quirófano debe estar en buen estado y contar con los controles de sanidad al día.
Lamentablemente esto no siempre ocurre y con la llegada de la primavera aumentan las intervenciones estéticas, oportunidad en la que muchos pacientes, por ahorrar dinero, terminan acudiendo a lugares que no cuentan con especialistas en el área o las condiciones mínimas para operar, poniendo en riesgo su salud y su vida.
Según explica el cirujano plástico Roberto Prado, miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica (SCCP), “desde la institución promovemos el Triángulo de Seguridad, que consiste en que antes de cada operación el paciente debe considerar tres puntos: el primero es que el mismo paciente se informe sobre los riesgos de la operación, el segundo factor es atenderse con un cirujano plástico acreditado y el tercero, que se atienda en establecimientos autorizados para realizar cirugías plásticas, los que deben cumplir con normativas y reglamentos que exigen la Superintendencia de Salud y Ministerio de Salud para su funcionamiento”.
Cada operación tiene sus propias complejidades, pero si se cumplen estas recomendaciones, los riesgos bajarán considerablemente. Es por este motivo que el profesional entrega algunas recomendaciones que todo paciente que está próximo a realizarse una cirugía plástica debe considerar.
“Es fundamental que el médico esté acreditado, algo que puede confirmar en la página de CONACEM, también es necesario que siga todos los consejos pre operatorios para conseguir los resultados que tanto el paciente como el doctor esperan. Si estos pasos previos son seguidos rigurosamente, se evita el riesgo de presentar complicaciones, por lo que junto con la decisión de operarse, es necesario que exista un compromiso por parte de los pacientes de cumplir al pie de la letra las indicaciones para antes y después de la intervención quirúrgica”.
Si bien cada operación tiene sus propias recomendaciones, el doctor Roberto Prado señala que es importante conocer el historial clínico y los medicamentos que utiliza el paciente, realizarse los exámenes preoperatorios señalados por el médico, evitar tomar antiinflamatorios y aspirinas, ya que estos aumentan el riesgo de sangrado durante la operación.
El cigarro es otro factor a considerar, ya que el cirujano explica que “esto puede retrasar o perjudicar el proceso de cicatrización, por lo que se debe dejar por completo al menos 2 meses antes de entrar al quirófano”.
Seguir al pie de la letra los cuidados pre y post operatorios establecidos por el profesional, sin duda, contribuirán a obtener un buen resultado tras la cirugía, evitando arriesgar la salud o, incluso, la vida.
Cirujano plástico y reconstructivo, miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica, acreditado por CONACEM.
Miembro del staff de Clínica Indisa, Clínica Universidad de Los Andes y Centro Médico El Golf.
